Categorías: Tribunales y justicia

Tres guardias civiles se sientan en el banquillo acusados de torturas

Destinados un mes en 2006 a la vigilancia de la valla, ayer negaron haber golpeado a un joven tras confundirlo con quien atracó a un compañero. El denunciante insiste. ¿Qué sucedió el 14 de enero de 2006 para que tres agentes de los GRS de la Guardia Civil, que estaban destinados a la salvaguarda de la valla, se sienten en el banquillo acusados de un delito de torturas? Responder con la más cercana aproximación a esa pregunta es lo que intenta, desde ayer, el tribunal de la Sección VI de la Audiencia Provincial. El joven S.M.M. les acusa de ser quienes, aquella madrugada, le propinaron varios golpes y le vejaron tras, presuntamente, confundirle con otra persona que, momentos antes, y, navaja en mano, había atracado a un guardia civil compañero. Los agentes, que estaban fuera de servicio, se encontraban en el Poblado Marinero cuando ocurrieron estos hechos.
Tras un intento previo de suspensión del juicio, ayer comenzó la primera de las dos sesiones que prevé acoger el máximo órgano judicial. Una sesión marcada por dos versiones enfrentadas: la de los tres guardias civiles que niegan haber golpeado al joven (ninguno quiso responder a las preguntas de la Acusación Particular) y la de éste, que insiste en que, “tras haber sufrido la paliza de su vida”, está seguro de que ésta fue perpetrada por los componentes del Instituto Armado, que tan solo estuvieron desplazados a Ceuta durante un mes.
Los agentes J.C.H.G. y P.C.N.R. ofrecieron unas testificales bastante acordes. El primero recordó que un compañero les dijo que había sufrido un atraco y al ver por la zona a la víctima creyó que podía ser el autor, más si cabe al, dijo, “hacer amago de salir corriendo”. Esa actitud le hizo intentar agarrarle alcanzando a hacerlo de su capucha, “pero no le golpeé”, insistió tantas veces como ocasiones en las que, sobre este extremo, le preguntó el Ministerio Fiscal. Al comprobar que no era el atracador lo dejó. En ningún momento, dijo, se identificó como guardia civil ni tampoco vio que el joven presentara lesión alguna. Como sorprendente valoró que, un día después de los hechos, al acudir al juzgado como testigo ante lo que iba a ser un juicio rápido, se topara con el joven marcado a lesiones. “No tengo ni idea de cómo se las hizo. Al verlo así nos quedamos perplejos”, aclaró.
El segundo de los agentes ratificó la declaración del compañero, añadiendo que cuando vieron al denunciante éste les dijo “yo no he sido” y después echó a correr, lo que les hizo pensar que pudiera ser el atracador de su compañero. Este agente sí matizó que la UIR llegó tan pronto al escenario de los hechos que no habría dado “tiempo material” a que se produjera la paliza que la víctima dice que sufrió. Aclaró, además, que a los policías locales sí les comunicó que eran guardias civiles y que su compañero había sido atracado sin saber si este extremo se produjo por su condición de agentes o no. Al igual que su compañero dijo que al ver al denunciante en los juzgados con las lesiones pensó que había sufrido un atropello, negando que ellos hubieran tenido algo que ver. Después matizó que tuvo conocimiento “por compañeros de Ceuta” que esas lesiones se les había “inventado” o “falseado” para “sacarnos los cuartos”.
El tercero de los agentes en declarar, llamado M.Z., iba algo más atrás en el recorrido de aquella madrugada, por lo que en ningún momento estuvo cerca de sus dos compañeros en esa acción. Negó a preguntas de la Fiscalía que se hubiera producido agresión alguna pero sí que aportó un dato opuesto al de sus compañeros, ya que mientras éstos mantuvieron que nunca vieron al denunciante con lesiones en el rostro, este agente sí que dijo que, de regreso a la zona del Poblado, vio a la Policía Local junto al denunciante buscando a los posibles autores del puñetazo que había recibido. Recordó que el joven mostraba una rojez en el rostro y que decía que le habían lesionado en uno de los brazos.
El juicio se reanudará hoy estando previstas las declaraciones de agentes de la Policía Local que actuaron esa noche, familiares directos del joven denunciante así como el médico forense que le atendió y que valoró las lesiones que presentaba y que, de hecho, dieron pie a la apertura de este procedimiento por torturas.
La Fiscalía acusa solo a dos de los agentes y lo hace por falta de lesiones mientras que la Acusación Particular entiende que se está ante un delito de lesiones, otro contra la integridad moral y un tercero de torturas que extiende a los tres. “Solo quería irme a mi casa, llorar, me habían dado una paliza” La narración de los hechos aportada por la víctima, que prestó declaración a través de videoconferencia, fue contraria a la de los guardias civiles. Insistió en que dos de los agentes le pegaron de frente mientras uno le tenía cogido por detrás. Cronológicamente habló de que, primero, le dieron un puñetazo por la espalda, después le insultaron para seguir con empujones y golpes, amén de amenazas de muerte. ¿Son los tres guardias que se sientan en el banquillo los autores de esta cadena de agresiones? El joven dijo que sí aunque, a cámara, dudaba en las identificaciones, algo que atribuyó al paso del tiempo. “Han pasado diez años, estaba oscuro...”, dijo, matizando al momento que la Policía, al hacer acto de presencia, tuvo que identificar a los que estaban allí. “No tengo dudas, si están ahí es porque son ellos, porque la Policía los identificó”, insistió. A preguntas de la Acusación Particular aclaró que tras la agresión sufrió daños morales y requirió de tratamiento psicológico. Lamentó que, siendo hijo de guardia civil y habiéndose criado con guardias civiles, los acusados nunca hubieran llamado para excusarse, insistiendo en que la agresión cesó cuando apareció la Policía Local. El hecho de que en su denuncia inicial no diera tantos detalles sobre la agresión sufrida lo basó en que, en esos momentos de nerviosismo, “solo quería irme a mi casa, llorar, estaba fatal, quería sentirme protegido me habían dado la paliza de mi vida. Fue un palo bastante grande saber que tres guardias civiles me querían matar porque yo me he criado en un cuartel”, recalcó. Las Defensas de los agentes hicieron hincapié en que durante el procedimiento ha habido dudas en las identificaciones.

Entradas recientes

Tres detenidos por lesionar a un menor, lo ataron con cadenas

Funcionarios adscritos a la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Ceuta…

24/06/2024

Solventada la avería de la máquina que analiza la droga

La avería detectada en el cromatógrafo de gases, que impidió que se celebraran semanas atrás…

24/06/2024

El cheque libro no se da hasta septiembre, Ceuta Ya! lo tilda de "chapuza"

Ceuta Ya! ha arremetido contra el cheque libro dispensado por el Gobierno local, que no…

24/06/2024

Nuevo vallado en Ceuta

Desde hace años existe un vallado que nos separa del país vecino y evita esos…

24/06/2024

China construye en Marruecos una cadena de suministro de baterías de coches eléctricos

China está construyendo una cadena de suministro de baterías para vehículos eléctricos (BEV) de Europa…

24/06/2024

El Campus de Verano de la RFFCE, en marcha con más de 100 participantes

El 'Campus de Verano', que como cada año organiza la Real Federación de Fútbol de…

24/06/2024