El
Gobierno de España ha encargado a la empresa pública
Tragsatec la elaboración de los planes estratégicos para las dos ciudades autónomas de
Ceuta y
Melilla que Pedro Sánchez prometió confeccionar tras la crisis migratoria de mediados de mayo. Así lo ha anunciado este miércoles en Ceuta el secretario de Estado de Política Territorial, Alfredo González, que ha avanzado que los documentos para garantizar “un futuro de seguridad, estabilidad y prosperidad” a ambos territorios deberían estar terminados “en junio”. Recogerán los “proyectos, inversiones y reformas” que se consideren necesarias para “incentivar la creación de oportunidades, asegurar su viabilidad y progreso económico y reforzar su cohesión social” con una “prioridad”: que formen parte de “zonas de prosperidad compartida” en un marco de “buena vecindad con Marruecos”.
En rueda de prensa junto al presidente de Ceuta, Juan Vivas, González ha asegurado que “todas las valoraciones técnicas y políticas” para decidir sobre cuestiones estructurales como la entrada de las ciudades autónomas en la Unión Aduanera europea o eliminar su excepcionalidad en el Tratado de Schengen deberán “tener en cuenta esa prioridad en el marco de la buena vecindad con Marruecos”. El alto cargo ha justificado el encargo realizado a Tragsatec en que ese medio propio del Estado “tiene una amplísima experiencia en la elaboración de planes de desarrollo territorial” y ha concretado que dispondrá de 14 personas (habrá un equipo destacado en Ceuta y otro en Melilla y un tercero encargado de su “coordinación” desde Madrid) que trabajarán “con la colaboración de personal externo y expertos conocedores de la zona y las distintas materias que formarán parte de estos planes estratégicos”.
Además, se desplegará “un potente aparato de recepción de propuestas de las administraciones y los agentes sociales” para concretar las “inversiones, reformas y proyectos” necesarios para “garantizar la prosperidad económica y social” de ambas ciudades a través, entre otros instrumentos, de los fondos europeos que recibirá España durante los próximos años. “Queremos que los planes recojan el máximo posible de aspectos: el impulso de las conexiones con la península, el refuerzo de los servicios públicos, cómo asegurar la viabilidad económica y establecer un nuevo posicionamiento estratégico... que hablen de infraestructuras y de proyectos de inversión, que incentiven la creación de oportunidades y que refuercen la cohesión social”, ha enumerado González.
Vivas se ha congratulado por la “constructiva y positiva” reunión que ha mantenido con el secretario de Estado y se ha felicitado por las novedades recibidas sobre “una iniciativa absolutamente necesaria, vital, para que miremos el futuro con confianza”. “Tras el momento crítico de mayo pasado, que nos cortó la respiración y nos puso el alma en vilo temiendo lo peor, este encuentro ha confirmado que Ceuta ha sufrido un duro golpe, pero sigue en pie y saldrá adelante”, ha apuntado.
Entre las razones para “confiar” en el porvenir de la ciudad el presidente ha enumerado la “explícita, firme y compartida” defensa de la españolidad de la ciudad que hizo el Gobierno central con Sánchez a la cabeza durante la crisis de hace siete meses, así como el hecho de que desde entonces hayan sido “el espíritu de la Constitución, la lealtad institucional, la unidad, la responsabilidad y el sentido de Estado” los principios que han marcado la colaboración entre instituciones “al margen de intereses partidistas y con el de Ceuta, los ceutíes y España por delante”.