Guatemala y España, dos países separados a 8.579 kilómetros de distancia pero unidos por un mismo deporte, el fútbol sala. Así fue la unión en Ceuta entre Tomás de Dios, actual entrenador de la Unión África Ceutí y Tamara Deleón, también conocida como Tammy, jugadora del
Camoens Femenino.
Ambos comenzaban sus carreras deportivas de forma individual. Tomás de Dios comenzó directamente en el mundo del fútbol sala. En el caso de Tammy, inició en fútbol 11 pero cuando comenzó la liga femenina de fútbol sala en Guatemala, no dudó en emprender su andadura en este deporte. La selección de Guatemala en la que los dos estuvieron presentes, uno como seleccionador y otra como jugadora, fue el hilo conductor a iniciar esta relación.
Tras finalizar el contrato de Tomás de Dios, ambos decidieron venir a España donde siguieron desarrollando sus carreras deportivas. Este año, debutaban en dos equipos ceutíes, donde la acogida de cada cuerpo técnico, como la de los jugadores y jugadoras, ha sido exitosa.
Pero el camino hasta aquí tienes sus inicios. Tammy decidía dejar de lado el que denominamos fútbol grande para emprender su andadura por el fútbol sala. “Comencé a jugar fútbol sala más o menos tarde, a los 22 años. Fue cuando comenzó la liga de fútbol sala femenino en mi país. La mayor parte de mi carrera se ha desarrollado en Guatemala hasta los 28 años, más o menos, que fue cuando me vine a España”.
"Compartir la pasión por este deporte es algo bastante bonito y especial para ambos”
En el caso de Tomás de Dios, su camino en este deporte comenzó en el año 1992, “comencé en el suprimido servicio militar, donde me enganché a este deporte y desde entonces ha sido una gran adicción”.
En su larga carrera deportiva, Tomás de Dios desempeñó el papel de seleccionador en la selección de Guatemala masculina. Para su casualidad, Tammy en ese momento era jugadora de la selección femenina de este mismo país. Esa coincidencia, y este deporte, fueron el hilo conductor de la actual relación. “Nunca la dirigí sino que estaba dentro del cuerpo técnico. Ella tenía a su seleccionadora y yo dirigía a la selección absoluta. Pero ese hilo conductor, fue el fútbol sala”.
Algo inesperable para ambos era encontrar el amor dentro del fútbol sala. “La pasión por el deporte fue lo que nos unió. Además del fútbol sala hemos coincidido en valores y en forma de vida. Compartimos mucho de este deporte tanto dentro como fuera. En ese sentido es algo bonito y especial”, comentó Tammy.
En cuanto a fútbol sala, aunque se trate del mismo deporte, cada país tiene un estilo de juego diferentes, “España es una potencia mundial. Todos los entrenadores que hemos estado en Latinoamérica o en Asia o en Europa, pues lo demuestra. Somos potentes, somos Campeones del Mundo, somos Campeones de Europa. A parte Guatemala es un país en desarrollo, allí prácticamente no hay jugadores profesionales. Lo que sí hay es una grandísima pasión y unas grandísimas ganas de aprender. Esa pasión fue bonita disfrutarla. Y además Guatemala me llevó a un Mundial, que era uno de mis sueños deportivos”.
Una vez finalizado el Mundial, Tomás de Dios terminó su contrato con la selección de Guatemala. A partir de ahí decidieron volver a España y seguir con sus respectivas carreras deportivas en este país. “Vinimos inicialmente a Burela, a un equipo de Primera División en Galicia. Luego llegamos a Salamanca, donde estuvimos cuatro años. Para mí adaptarme no fue fácil. La cultura y la forma de vida es muy diferente. En Burela estuve entrenando un tiempo con el equipo femenino. Me busqué la vida para jugar, tuve que empezar de 0 aquí en España. Llegué a Salamanca, estuve en un equipo de Valladolid porque era el que estaba en Segunda División en ese momento. Fui a hacer la prueba, me quedé ahí. Comencé a jugar hasta la segunda vuelta por tema de papeles. Después estuve en Salamanca con otros dos equipos de Segunda División. En mi país falta mucho desarrollo de este deporte y aquí la liga tiene estructura y mucha calidad. Me ha costado hasta cierto punto porque yo estaba jugando con compañeras de toda la vida. Venir aquí y estar entre un club y otro me ha costado. Pero estoy agradecida con la experiencia y valorando el hecho de estar aquí ”.
Debut en los equipos ceutíes
Tanto Tomás de Dios como Tammy debutaban este año en dos equipos ceutíes.
En el caso de Tomás de Dios, llegó para dirigir la
UA Ceutí, “desde un principio nos hemos sentido muy bien. A nivel profesional estoy contento de poder estar aquí en Ceuta. Estamos trabajando como un equipo de Primera División, estamos haciendo ocho sesiones, tenemos 14 jugadores de dedicación exclusiva y estamos en la pelea de estar entre los cinco primeros. Siempre estamos pensando en qué podemos mejorar”.
En cuanto a Tammy, vino a Ceuta para militar en las filas del Camoens Femenino, “tuve contacto con el entrenador cuando vine porque mi intención era seguir jugando en Segunda División. Sabía que aquí había bastantes equipos por lo que contacté con el entrenador cuando vine de mi país, porque me fui un mes allí de vacaciones ya que no iba desde hacía tres años y con el tema del Covid no pude ir, entonces cuando llegué, hablé con él y rápidamente me abrieron las puertas del equipo. Desde el principio todo ha ido muy bien. De todos los clubes en los que he estado este es el que hace las cosas de forma más profesional. Tenemos casi seis sesiones a la semana más el partido. Mis compañeras me han abierto las puertas de su casa y de su amistad. Estoy bastante cómoda y bastante feliz”.
Compartiendo pasiones
A partir de su coincidencia en la selección de Guatemala, donde surgió el amor entre ambos, Tomás de Dios y Tammy decidían emprender un camino juntos tanto en lo sentimental, como en lo deportivo.
Ahora en Ceuta, deciden seguir compartiendo pasiones y apoyándose en cada paso que da dentro del mundo que comparten.
Esta pareja se ayudan a crecer el uno al otro en el fútbol sala, uno como entrenador y otra como jugadora y ahora también como entrenadoras de categorías inferiores de su propio club. “El salón de casa tiene una pizarra del tamaño de una pantalla de televisión, es cierto que no nos la pudimos traer hasta aquí pero la tenemos. Tammy también tiene el Nivel 1 de entrenadora y entrena a niñas en las categorías inferiores del Camoens. Siempre hay debates, cuando salimos a comer somos los típicos que nos ponemos a mover los vasos para colocar a los jugadores y jugadores. También nos contamos nuestras historias, y valoramos cómo hago yo algo o cómo lo hacen ellas. Podemos decir que el fútbol sala es nuestro elemento transmisor dentro de nuestras emociones del día a día. Estamos todo el día en chándal y todos los fines de semana de partido. Intercambiamos opiniones y sobre todo, fútbol sala”.
Trayectoria
Tamara Deleón se encuentra actualmente en el Camoens Femenino de Segunda División. Tomás de Dios es el actual técnico de la Unión África Ceutí que milita también en Segunda División. Ambos disfrutarán esta temporada del fútbol-sala de categoría nacional en Ceuta.