Quien nos iba a decir, a los ceutíes, que algún día podíamos disfrutar de nuestro propio show un pleno sí y al otro también.
Gracias al grupo político de Vox, Ceuta ha conseguido no solo los quince minutos de gloria, que decía Andy Warhol, en este caso televisivos, sino que hemos acaparado todos los zapping de lo que nos queda de legislatura.
Hasta ahora, jamás habíamos visto un espectáculo tan bochornoso en un pleno de nuestra ciudad, una falta de respeto por la institución en sí, por el reglamento y sobre todo hacia los demás diputados y concejales que componen la asamblea de nuestro ayuntamiento.
El salón del pleno siempre acaba con una violencia inusitada por parte de este grupo que cree que, hacer política, consiste en el “todo vale” como en las guerras y en el amor, aunque lo que a amor se refiere… éste brilla por su ausencia; mejor se les da aquello de insultar e injuriar a todos y a todas las personas que no piensan igual que ellos.
En su afán de protagonismo, como la de un niño pequeño cuando reclama la atención de un adulto, la única forma de hacerse notar que tienen es la de patalear, gritar y chillar y como no, la consabida rabieta que, les hace abandonar el pleno para no oír lo que tiene que decir la diputada de turno, en este caso, la sufridora y diana de sus ataques racistas, Fátima Ahmed; aunque no se cortan ni un pelo en “no dejar títere con cabeza”.
Creo sinceramente que, todos los grupos que conforman el Consistorio, tendrían que cobrar un plus por aguantar a estos chiquillos malcriados tan inseguros y dependientes que no entienden que ellos no son el centro de atención de nadie y, para remediar estas conductas infantiles, que muchas veces son causadas por pautas educativas poco adecuadas o algún problema emocional, lo mejor en estos casos es, poner límites a este comportamiento con técnicas de modificación de conductas. Uno de estos métodos se denomina en psicología “tiempo fuera”, consiste básicamente en retirar las condiciones del medio que permiten obtener reforzamiento a la persona que está realizando conductas no deseadas, o sacar a las personas de éstas durante un tiempo, de manera contingente a la emisión de esas conductas, es decir, cuando se porten mal, hay que enviarlos al rincón de pensar, como se hacía antiguamente en los colegios, mirando a la pared y sin hablar. Creo sinceramente que, entre todas las técnicas de eliminación de conductas ésta es la más efectiva con este grupo político, ya que ellos solitos se han retratado al irse durante el transcurso del pleno.
Alguien tendría que decirles a estos señores que, en la política se está para trabajar para y por el pueblo, con proyectos, ideas y propuestas para mejorar la situación laboral, educativa, sanitaria, juvenil, social y un largo etc., no para perder el tiempo en debatir cómo se ha de bañar una mujer, si desnuda, en biquini, triquini o como le dé su real gana. También necesitan de una dosis de cultura ya que, no se han dado cuenta que viven en una ciudad multicultural, con diferentes tradiciones y costumbres y que nunca han tenido ningún problema hasta el día en que han aparecido estos descerebrados en la vida pública y política de nuestra ciudad y de nuestro país.
No se cansan de repetir que han sido la fuerza más votada en esta ciudad y desde aquí les recuerdo a esta gente y a sus votantes que, Hitler ganó unas elecciones legales y la cosa acabó como ya conocemos todo el mundo, con un genocidio, uno de los episodios más negros y terroríficos de la historia de la humanidad y todo comenzó con el discurso de odio hacia él o la diferente, con mentiras, con la creencia de la supremacía blanca, con la convicción de la raza Aria…
Señores y señoras, solo existe una raza y es “La Raza Humana”, independiente de su color, origen o credo y que todos tenemos derecho de vivir en un sitio digno, donde prime por encima de todo, el respeto.
Lo que tienen que hacer esta formación extremista es, aprender a hacer política. Como he leído recientemente en una página de google: “la política es organizar la convivencia, se ocupa de la actividad de una sociedad libre, compuesta por hombres libres, resuelve los problemas que le plantea su convivencia colectiva”.
Como pueden ver, es todo lo contrario a lo que hace Vox, que lo único que sabe hacer es incendiar los plenos, discriminar y perseguir a los inmigrantes, buscar conflicto donde no lo hay y sobre todo estigmatizar a la mitad de la población de esta ciudad con argumentos racistas y xenófobos que invitan al separatismo y a una convivencia negativa para todos los ciudadanos de nuestra tierra y si no queremos que esto ocurra, invito a todos mis conciudadanos que, el día de las elecciones que no se quede nadie en casa, que todo el mundo acuda a las urnas a votar. Es la única forma de parar al fascismo.