Jesús Blanco 'Tete' es uno de esos personajes que ayudan
a narrar la historia reciente de Ceuta, no aquella que sale en las mal llamadas crónicas oficiales pues las anécdotas personales de los que han vivido esta ciudad son tan válidas como los boletines solemnes.
El libro 'Un niño de Villajovita, historias de un gordinflón' ha sido presentado en la tarde de este domingo en La Barraca
del Parque Marítimo con Tete arropado de familiares y amigos pero también de autoridades locales, pues no cabe duda de que su grandeza no pasa por alto entre sus vecinos y allegados que le demostraron su cariño más sincero. Él devolvió ese cariño con una sentencia que es a su vez es un lema de vida: “Tenemos que vivir y ser felices con lo que nos ha tocado”, esgrimió sobre su historia personal. La presentadora Yolanda Bel, amiga del autor, lo ha definido como una persona con gran sentido del humor y una persona con una altísima capacidad de superación por su fortaleza para afrontar la vida y las adversidades. "Tete no sólo cuenta anécdotas sino que enseña y mucho a aquellas personas que han padecido obesidad mórbida, él está ahí para ayudar a cualquiera, pero también es una enseñanza para los que no padecemos ninguna enfermedad aparentemente física pero sí limitaciones”, ha manifestado Bel, quien ha elogiado al escritor como una persona valiente y un hombre entrañable, lleno de sentido del humor. “Es el quinto libro que publico y es especial porque me desnudo por completo en el libro, cuento todas las cosas que como un gordo travieso me han pasado porque me he metido en todos los charcos del mundo”, ha explicado Jesús Blanco, encantado por poder disfrutar con tantos amigos y familiares, su sostén vital, un rato tan especial.
Una narración que no es otra cosa que vuelta a la infancia: “Cuento mi niñez en un barrio que hoy no es el que era, antes éramos todo una familia, a lo mejor le llamaban ‘Villavisillos’ porque había cotillitas, pero nunca he visto una pelea, solamente tolerancia y respeto”, esgrimió el narrador sobre las vivencias en una barriada en la que, como es lógico, cada vez quedan menos vecinos antiguos, aunque él nació y allí sigue viviendo. Es el quinto libro de este vecino de Villajovita, que ha encontrado en la escritura una forma de vida y de sacar adelante una pasión para la que siempre encuentra tiempo. Una manera de conectarse con su gente y con los recuerdos. “Para lo que a uno le gusta se saca tiempo”, ha señalado Blanco, quien incluso ya piensa en su próximo obra con otra historia familiar. La recepción de los primeros que han leído ‘
Un niño de Villajovita, historias de un gordinflón’, el quinto libro de Tete, está siendo muy buena y los primeros lectores ya se han echado unas risas con esta historia sentimental de una persona que tuvo un momento crucial cuando llegó a pesar 210 kilos. “Es un tema importante porque entre gracias, chistes y cosas que me han pasado transmites un mensaje a todas las personas que han tenido o tienen los problemas que yo he tenido de tomate la vida como yo me la tomé, igual que hay flacos, altos y bajos a nosotros nos ha tocado ser gordos y hay que vivir y ser felices y punto”, ha concluido.