Soy tu guardián suspirando a barlovento, porque quiero acompañarte de tu santuario por tu paseo, por tu caminito del mercado y dar mi sueño de amor para poderme expresar que si alguna vez arrancaste motores en mi barquilla, decirte de lo más hondo cuanto te quiero.
Arriba donde las montañas se encuentran con los cielos, salieron como relámpagos que separan el mar, podría jugar que alguien en algún lugar mirándome, a través del viento y el frío con la lluvia, siendo la inundación y la tormenta como se aproximan como un fuego en mi sangre.
A ti Reina de los Mares, mi nave hace 38 años es aquella que entre fuegos y tinieblas, fatigas y penas, recorriendo ríos y mares, quisiera Patrona estar contigo y que nada a mi barco le importe.
A la Reina de los Mares, formamos los ángulos de proa de la toldilla, y otros en la popa del castillo, abarloa, y enarbola, empavesado nos vemos, y suspirando de nuestros corazones, Salve Estrella de los Mares.
No me vienen fácilmente ,esta es la única manera, Reina mía, para mí decir te amo.
A los que están acompañándote en tu día, a los que están asomaitos a la balustrada a la gente venidera que te quiere y te venera y a los que se marcharon para siempre marcándote el rumbo de las estrellas, a la memoria del abuelo Bernardo, Papá y Mamá, al tito Pepe, Don Miguel Angel Vallejo, Don Juan Carrasco, Don Ignacio, Don Alberto Alé, Don Humberto Mérida, Francisco Borrego y Alfonso Mi Purito, a las Carminas con su mirada entre arena y espuma y si alguna vez mi pluma se queda encallada en la orilla allí tienes un marinero Patrona que te guía nunca te olvido Alfonsito ya la Reina de los Mares te ha llevado a la luz cuando la pena nos alcanza por un compañero perdido es el sueño dolorido en fecha tan señalada.
"Treinta y ocho años no son nada al rumor de las olas donde mi tierra avanzada en el Estrecho siempre está solita por encima del mar"
Treinta y ocho años no son nada al rumor de las olas donde mi tierra avanzada en el Estrecho siempre está solita por encima del mar. Nunca antes tuve este sentimiento, nunca se lo dije a nadie y algo cada mañana del 16 de julio amanece mi Ceuta engalanada mi barquilla.
En tu mirada, Virgen del Carmelo, todos los sueños secretos, todas tus alegrías, todas tus tristezas, todas tus mañanas y lucero del alba guiando a los mercantes, traíñas y buques que he visto pasar toda mi vida vagando de todas tus maravillas.
Mientras te sumerges con mis hermanos en la orilla, descalza, te veo al suspiro de los caballas donde la piedra del Pineo recibe una ofrenda, mientras viva, déjame darte este cariño enamorado en la barquilla, entre el cielo y el mar son testigos de orilla a orilla.
"Soy tu guardián suspirando a barlovento, porque quiero acompañarte de tu santuario por tu paseo"
Tantas veces que pasé de largo sin mirarla porque yo fuera uno vestido de blanco del arte natural quien surcara los mares, las noches de fiesta en la Lonja de Pescadores, apretara los puños y empujones, para ver con razón o sin ella, quienes éramos mejores al timón para anudarla y atracarla montada en su barquilla.
Asociación hijos de Nuestra Señora del Carmen, gracias por acogerme como uno más, para ser tu guía, tu presentador y tu soñador y como olvidar la arena ardiente y las almas estremecías...llevo los hábitos y tu voz padre Alcedo, Rosi Gónzalez, pendiente de Pedro García, y las fotos que hacen Jacobo Díaz y Rubén Campaña, olé que maravilla, no puedo olvidar tu navegar por la banda de estribor.
Nunca pierdo la pista de ningún navío, si tuviera un paraíso, donde conquistarte a mi vera, ese sería el amanecer en La Ribera, si tuviera un paraíso donde conquistarte a mi vera ese sería el amanecer en la Ribera, y aquí Virgen del Carmen te veo marinera yo que tantos sueños he dejado en la arena, sólo te digo hasta la vista.