La Ciudad Autónoma mantendrá el próximo año su apoyo con subvenciones de la Consejería de Educación y Cultura a las distintas comunidades tradicionales de Ceuta pero cambiará ligeramente el esquema sobre el que ha organizado el reparto de las dirigidas a la islámica. En vez de dedicar toda la partida a una convocatoria de proyectos en régimen de concurrencia competitiva, en 2018 se prevé conceder una subvención nominativa directa a la Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE) con un importe de 35.000 euros y mantener el resto, 69.000 euros, para que las distintas asociaciones de la ciudad presenten proyectos dirigidos a esa parte de la población que cumplan los requisitos para ser financiados con fondos públicos.
El consejero de Educación y Cultura, Javier Celaya, recordó ayer a este periódico que la Administración seguirá apoyando “a todas” las comunidades “representativas” con objeto de “fomentar la diversidad cultural en la ciudad”.
Así, la Hindú recibirá 25.000 euros y la Israelita, 60.000. La Cofradía de San Daniel percibirá 3.000 y la de Santa María de África, 18.000. Al Consejo de Hermandades se le transferirán 150.000 euros y a la procesión Magna Mariana, 60.000.
“Aunque la comunidad musulmana no tiene una ‘estructura jerárquica’, por así decirlo, como la Católica, por ejemplo, nos hemos decantado por la UCIDE como entidad más representativa a nivel nacional para la concesión de una subvención nominativa y mantener el resto en régimen de concurrencia competitiva pero evitando que, como ha sucedido este año, se perdiesen parte de los fondos presupuestados por tratarse de proyectos repetidos o que adolecen de fallos a juicio de la Comisión de Valoración”, explicó Celaya.
En la resolución publicada en julio se acordó financiar ocho proyectos socioculturales dirigidos a la Comunidad Islámica en Ceuta presentados por Paloma Blanca, DIGMUN, Sibila, Intercultura, la Fundación Cultural Abdelmalik Saadi, Al Bujari, As Husna y Luna Blanca.
La finalidad de las citadas subvenciones es fomentar la participación de asociaciones y entidades públicas o privadas “en el desarrollo de proyectos y actividades socioculturales dirigidos a la Comunidad Islámica al objeto de ampliar los recursos existentes para cubrir sus necesidades dentro del ámbito educativo y sociocultural, impulsando el avance de los principios sociales básicos en una sociedad multicultural”.
En la última convocatoria los criterios que se tuvieron en cuenta fueron: a) Contenido, relevancia y calidad del proyecto o actividad en función de los objetivos planteados; b) incidencia social (sobre todo número de beneficiados y alcance de las actuaciones; c) aportación económica, humana y material de la entidad; y d)carácter innovador de las actividades a programar.
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