Pudo haber sido una desgracia pero la rápida actuación de Bilal Abdeselam, socorrista de Marsave, evitó una tragedia mayor. Fuera de servicio, estaba disfrutando de un día de playa en Benzú con sus familiares, cuando se percató, en torno a las 15.00 horas de esta tarde, de que un bañista estaba, a unos 20 metros de la orilla, en mal estado.
Bilal se lanzó al agua y lo rescató mientras los usuarios de la playa alertaban a la Guardia Civil, que acudió con su neumática al lugar.
Hasta Benzú ha acudido la Benemérita y también socorristas de Marsave de servicio, con un botiquín de primeros auxilios alertando además a la UVI móvil del propio servicio. Una vez en el lugar y después de una valoración secundaria, se le presupone que el bañista ha sufrido una hidrocución (corte de digestión) severa.
Ahora permanece ingresado en el HUCE, habiéndose evitado una tragedia. La playa de Benzú no tiene servicio de socorrismo, pero la presencia de Bilal fue clave para que todo saliera bien. Marsave, no obstante, desplazó a sus socorristas al lugar.
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