Sobre participación y Planes de gestión de residuos

El tratamiento de los residuos generados en Ceuta ha dado y sigue dando mucho que hablar. Quizá sea éste el asunto que mejor ilustra el importante desfase de nuestra ciudad en el desarrollo de las políticas medioambientales respecto al resto del territorio español, y ya no digamos si lo comparamos con los logros alcanzados en otros países europeos. Tal y como se expone  en el informe sobre residuos elaborado por el equipo del Observatorio de la Sostenibilidad, Ceuta demoró hasta el año 2001 el comienzo de la adopción de medidas  para tratar sus basuras. En este año se implantaron los primeros contenedores para la recogida selectiva de residuos, y al año siguiente se construyó la Planta de Transferencia de residuos que hizo posible el cierre definitivo del vertedero de Santa Catalina. En los años siguientes, entre el 2004 y el 2008, no se aprecian mejoras significativas, más bien todo lo contrario, ya que los escasos contenedores para la recogida de vidrio y cartón fueron disminuyendo en número por su deterioro y falta de reposición. Tenemos que esperar a mediados de 2008 para asistir a un avance digno de mención: la implantación del primer punto limpio.
Forma también parte de la historia reciente de la problemática del tratamiento de las basuras en Ceuta, la intención del Ministerio de Medio Ambiente, auspiciada y compartida por el gobierno de la Ciudad Autónoma de Ceuta, de construir en nuestra ciudad una planta incineradora, opción por la que, sospechamos, se decantaron los redactores del Plan Integral de Residuos que fue encargado a una empresa consultora en el año 2006 y que nunca se ha llegado a presentar. Creemos que la fuerte contestación ciudadana a este proyecto ha sido fundamental para la decisión final de la Consejería de Medio Ambiente de descartar este sistema de eliminación de residuos y comenzar de nuevo el proceso de  redacción de un plan integral de gestión de residuos, aunque no por ello queremos dejar de reconocer la sincera voluntad que hemos apreciado en la Consejera de Medio Ambiente de buscar una solución consensuada con la sociedad ceutí y más acorde con las peculiaridades de nuestra ciudad.
Para la redacción de este nuevo plan de gestión de residuos de Ceuta, la Consejería de Medio Ambiente ha decidido contar con el Instituto para la Sostenibilidad de los Recursos (ISR), una fundación que cuenta con una acreditada solvencia técnica y una prolongada experiencia en materia de residuos. De igual modo, la propia responsable de las políticas medioambientales en la Ciudad Autónoma de Ceuta, nos comunicó su intención de contar con Septem Nostra para representar a la ciudad en las reuniones que se habían previsto realizar para discutir el contenido del futuro plan de residuos.
Con gran expectación hemos esperado la celebración de estos encuentros de debate, como también están atentos los compañeros de la ejecutiva federal de Ecologistas en Acción, nuestros colegas de Guelaya-Ecologistas en Acción de Melilla, y Greenpeace que hace unos días se puso en contacto con nosotros, al poco de conocer la noticia del inicio de los trabajos de discusión que determinará el modo de gestionar nuestras basuras, para expresarnos su apoyo y ofrecernos su colaboración. Pues bien, después de esta espera, recibimos una escueta llamada telefónica en nombre de la fundación ISR para solicitarnos una dirección de correo electrónico donde poder enviarnos la invitación para participar en una ponencia técnica que iba a  tener lugar esta misma semana. Acompañaba a la invitación un dossier en el que se exponían los objetivos, la metodología y la programación  de las reuniones de las ponencias técnicas. A este respecto, y desde el más absoluto respeto y consideración a la fundación ISR, tenemos que hacer pública nuestra discrepancia con la metodología de trabajo elegida. Nos parece interesante y enriquecedor poder conocer las opiniones y experiencias de reputados profesionales o gestores relacionados con la gestión de los residuos, pero no podemos perder de vista que el objetivo principal es conseguir un plan de gestión de residuos acorde a las características de Ceuta. Y para ello deberíamos contar con un documento previo en el que se detallen las líneas directrices de este plan y se explicite las intenciones del gobierno de la Ciudad de Ceuta. A partir de este borrador podríamos iniciar un debate más detallado y profundo, que necesariamente tendría contar con un número reducido de participantes y un carácter más técnico en cuanto a sus integrantes. Ésta era al menos la idea que nos hicimos del procedimiento que la Consejería de Medio Ambiente había pensado para la discusión del plan de residuos, según se nos informó personalmente y se transmitió a los medios de comunicación locales y, en este contexto, tenía sentido que nuestra asociación fuera una de las entidades que “pilotara” este proceso y no un mero asistente a unas jornadas técnicas sobre residuos. Pensamos que al menos se podía haber propiciado un encuentro directo entre los representantes de la fundación ISR, la Consejería de Medio Ambiente y nuestra asociación para intercambiar pareceres y criterios sobre cómo tratar los residuos en Ceuta.  La visión de la asociación Septem Nostra sobre la participación de la sociedad civil en la búsqueda de soluciones a los retos ambientales es mucho más amplia que asistir a unas jornadas técnicas y aprovechar el turno de preguntas para expresar la opinión de cada uno. Nosotros apostamos por modelos de discusión más abiertos y participativos como el que sirvió para la redacción de la Agenda 21 Local de Ceuta.
Sin duda encuentros como el celebrado esta semana serán indispensables una vez que se haya avanzado en la redacción del plan residuos. En definitiva, consideramos que este tipo de ponencias técnicas pueden tener un interés para muchos agentes sociales, incluidos nosotros mismos, pero son poco eficaces para la discusión de este tipo de planes. Necesitamos un foro más restringido y técnico en el que podamos trabajar de manera concienzuda en la elaboración de una estructura sólida del plan de gestión de residuos . Éste es el compromiso que adquirimos con la Consejera de Medio Ambiente y al que  estamos dispuestos a cumplir si se dan las circunstancias.