Las autoridades marroquíes recuperaron este sábado los cadáveres de siete ciudadanos del mismo país hallados en las costas de Mohamedía, a unos 70 kilómetros al sur de Rabat, tras el naufragio de su embarcación neumática que intentaba llegar a las costas europeas.
Según informaron las autoridades locales en un comunicado, los siete cadáveres - entre los cuales está el de una mujer - fueron devueltos por el mar y encontrados en la playa de Ain Harrouda.
Las autoridades hallaron también a otras tres personas inconscientes que viajaban en la misma patera y que han sido ingresadas en el Hospital Provincial de Mohamedía, indicó la nota, que añadió que estas tres personas se encuentran en buen estado tras recibir la atención médica necesaria.
Todos los medios necesarios fueron movilizados para encontrar a otras eventuales víctimas.
El colectivo Caminando Fronteras asegura que hay más de 40 personas desaparecidas en este naufragio.
La nota añadió que las autoridades se movilizaron para la búsqueda de otros posibles ocupantes de la lancha al mismo tiempo que se abrieron investigaciones sobre el incidente.
Según las últimas cifras oficiales del pasado mes de agosto, las autoridades marroquíes abortaron en lo que va de año 57.000 intentos de emigración clandestina, que se suman a los 89.000 del pasado año.
En su última visita a Rabat el pasado 4 de septiembre, el titular del Ministerio del Interior en funciones de España, Fernando Grande-Marlaska, agradeció a Marruecos su contribución en la reducción en un 45 por ciento de las llegadas de emigrantes irregulares a Europa a través de las costas españolas.
Los servicios competentes, bajo la supervisión de la Fiscalía, abrieron una investigación para determinar los pormenores de la organización de esta operación de inmigración ilegal.
La Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA) también ha denunciado esta tragedia porque es “el resultado de las inhumanas políticas migratorias de la UE y Marruecos”.
Según la asociación andaluza, “aunque aún es pronto para confirmarlo, este nuevo drama podría acreditar la utilización de una nueva vía para las migraciones”, dado que en las últimas semanas varias pateras han llegado a la costa norte gaditana procedentes de las costas occidentales de Marruecos, una zona que comprende desde Salé a Casablanca.
“Como confirma la tragedia de Mohammedia -prosigue APDHA- es una ruta extremadamente peligrosa”, pues las pateras tienen que navegar mar abierto durante tres o cuatro días hasta llegar a su destino. Se utilizan además frágiles y viejas embarcaciones de madera, volviendo a la situación que se vivió en los años 90.
“Los acuerdos secretos entre España y Marruecos de finales del año pasado impiden la vía del Mediterráneo, ya que las fuerzas marroquíes vigilan de forma mucho más intensa toda la costa norte” apuntan desde la organización.
Desde el punto de vista de la APDHA, efectivamente es posible que el Gobierno español consiga su objetivo de reducir drásticamente los flujos migratorios hacia España desde Marruecos, “pero será desde luego a costa de los derechos humanos y de la vida de muchas personas que huyen de la crisis social, política y económica que vive nuestro vecino del Sur”.
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