La Alianza de los Saharauis Marroquíes en Europa para el Desarrollo y la Solidaridad organizó una sentada, el sábado en la Plaza de las Naciones Unidas en el Centro de Ginebra, para denunciar los crímenes cometidos por las milicias del polisario en los campamentos de Tinduf.
Los participantes en esta sentada, organizada al margen de la 40ª sesión del Consejo de Derechos Humanos, llamaron la atención en particular sobre la tragedia de los niños soldados reclutados por las milicias del polisario en los campamentos de Tinduf, recordando que estos últimos, de entre 7 y 14 años, fueron separados de sus familias y deportados a diferentes países para recibir formación en el uso de armas de fuego y explosivos.
Muchos niños perdieron la vida por la manipulación de artefactos explosivos antes de ser enterrados de forma anónima, mientras que los sobrevivientes suelen ser reclutados en ejércitos, guerrillas o grupos terroristas, denunciaron.
Para el secretario general de la Alianza, Ali Jeddou, esta sentada tiene por objeto alertar a la comunidad internacional sobre las violaciones masivas de los derechos humanos en los campamentos de Tinduf y hacer un llamamiento a las fuerzas comprometidas con la paz, la democracia y la libertad para que intervengan y ejerzan más presión a fin de poner fin a la dura prueba a la que se enfrentan los niños asociados con fuerzas o grupos armados.
En una declaración a la prensa, dijo que los participantes en la manifestación instaron "a la comunidad internacional y a las organizaciones humanitarias internacionales a intervenir urgentemente para poner fin a la dramática situación de nuestras familias confinadas en los campos de represión de Tinduf bajo el control implacable del polisario, que viola los derechos humanos más básicos".
También, señaló que los abusos cometidos por el Polisario, y respaldados por la junta militar argelina, empujan cada vez más a los jóvenes de los campamentos de Tinduf a adherirse a los grupos terroristas y las redes criminales en la zona sahelo-sahariana.
Esta sentada se enmarca en una operación de sensibilización a gran escala llamada "Paloma Blanca", iniciada por la Alianza de Saharauis Marroquíes en Europa para el Desarrollo y la Solidaridad con el fin de llamar la atención de la opinión pública sobre las violaciones de los derechos humanos perpetradas por los líderes y las milicias del Polisario.