Se terminó la espera

Ya se acerca, comienza el tiempo en el que Dios se entregará por entero para anunciar a Ceuta que la redención de sus pecados, sus dolores, sus miserias, sus penas y tristezas serán una fuente inagotable, rebosante en sus piedras, en la arena de sus playas y en el muelle de su espera, una verdad profunda que nace de los corazones caballas que no pueden aguantar más los latidos de la llegada de esos días de gloria.

Se acerca ese tiempo en el que Tú, Ceuta cofrade, serás bendecida por el Espíritu, ya has sido marcada por el aliento de Dios, y vas a ser testigo del Evangelio vivo que cada hermandad volverá a vivir una nueva primavera. ¿No has notado ese repeluco?, ¿no has sentido ya ese escalofrío? La primavera desbordada en la Plaza de África, los corazones abiertos de par en par por la Gran Vía, esa Vía que es el epicentro del sentir cofrade ceutí. El aliento divino hecho paso de palio espera ansioso en Manzanera, el suspiro del Espíritu recorre sus rincones todo el año, el pasado mes de septiembre se bajó del paso del Nazareno y se quedó dormido a los pies de San Juan en el Sagrario, y ahora viene y va posándose en las vidrieras, en las tulipas, dándole vida a ese Misterio que bajará por el Otero en unas cuantas jornadas.
Nuestras hermandades, soñadoras de la Pasión, se cogen fuerte de la mano de Dios, para iluminar su senderos con la Luz de la Redención Divina, se aferran a su fe y ponen todo su empeño en que todo salga a pedir de boca, sus esfuerzos serán inagotables y como dice mi buen amigo Marco: “nosotros hemos hecho todo lo que está en nuestras manos, están en perfecto estado de revista de la Cruz de Guía al Preste, no hemos escatimado en trabajo y esfuerzo, ahora estamos en manos del cielo”.
La Cuaresma está tocando a su fin, se van a abrir de par en par las puertas de nuestra mejor semana, todo está casi preparado para que las calles de Ceuta se inunden del fervor cofrade, y surque en el aire la saeta, con su sonido ronco y desgarrado, para llorar cantando la Pasión de Cristo y el dolor de María, Ceuta se hará Getsemaní y, durante siete días, vivirá a través de sus más preciados tesoros los Sagrados Misterios de la Redención y hará estación de penitencia a la Santa Iglesia Catedral cumpliendo una vez más las Escrituras...

¡Qué apunto estás, Manzanera!
seno virgen,tierra calma,
donde el olivo flamea
entre laureles y palmas,
amparando corazones
que en sus túnicas descansan.
¡Qué rubor por el Otero!
¡qué prisa por nuestras casas!,
en la esquina de aquel templo
bajo el peso de las andas
marañean enredaderas
entre la flor de las jarras
van trenzando las gaviotas
volantines y acrobacias,
nazarenos preparados
mientras la brisa atiranta
nuestros cíngulos atados
sosteniendonos el alma.
Se desatina el silencio
un arcángel corta el aire
se descoyuntan los cielos
del gozo que no les cabe
ya se va acercando el día
la tierra tiembla, los mares
desbaratan los confines
ciegos de espumas y encajes
y un tropel de angelería
reduplicando el mensaje
insiste: Mística Palma
ya te esperan por las calles
    
Todo está consumándose, las hojas del calendario han ido cayendo una a una dando paso a un tiempo mejor, la vida se resumirá en una semana, en las casas de hermandad hay un trasiego constante, se entregan túnicas, papeletas de sitio, se van montando los pasos, se acaba de decidir con que saya y con que encaje se vestirá cada dolorosa, en Manzanera ya están las palmas esperando ser recogidas por los niños para que sean bendecidas la mañana de ese domingo que no acaba de llegar, los ensayos de costaleros pasan a ser mudás de pasos, Nuestra Señora del Mayor Dolor prepara los cultos que darán fin a la cuenta atrás, y así, poco a poco irá alargándose la tarde, y una tarde soleada se verán los primeros nazarenos blancos subiendo la cuesta del Otero con paso apurado para llegar a la misa de salida, Ceuta verá un año más a Cristo entrando en Jerusalén, cautivo, humillado, flagelado. Todo será un preludio, una preparación para hacer el camino del Calvario. Ya se adivinan las aspas del madero que el Nazareno deberá cargar sobre sus hombros, la cruz se dibuja en el cárdeno cielo del atardecer ceutí, con su incontestable mensaje de dolor y muerte, recorriendo los caminos que conducen hasta el Gólgota, las pisadas se hacen más lentas, el pulso se ralentiza, Cristo toma su cruz y Ceuta marcha tras Él…

Esos sayones sin nombre
Lo bajan por Manzanera
Esos sayones sin nombre
Esos locos, mal fin tengan
¡ay, su cara de jazmines!
¡ay, sus ojos de pimienta!
¡ay, su boca de madroños!
¡ay, sus manos de canela!
Bebiendo temblor distante
Entre sogas y cadenas.
Su talle de señorito
Locura de las palmeras
Se cimbrea engarabatao
Por culpa de su inocencia
Hecho jolgorio de chusma
En las calles y plazuelas
Entre la furia cobarde
De esa gente que lo espera…

Y sin solución de continuidad todo irá cumpliéndose, como simbólica celebración eucarística, Ceuta rendirá culto a Cristo en la Cruz, el Cordero de Dios será sacrificado y alzará su figura severa sobre el extenso altar de sus calles y sus barrios. Todo se cumplirá, Cristo morirá en la cruz, la semilla será enterrada para que germine el domingo en gloriosa resurrección.
Pero hasta que todo esto ocurra han de pasar unas jornadas, aprovechadlas queridos hermanos, limpiad vuestras almas, rasgaos los corazones y no las vestiduras, aun estamos a tiempo de llegar al Triduo Pascual renovados por la cuaresma, antes de vestir la túnica o la sotana, fajarse de costalero o coger el tambor, si alguno tiene algo pendiente con su hermano, que deje la túnica , la sotana, el costal o el tambor sobre el altar, vaya a reconciliarse con su hermano y después que se revista para vivir plenamente su semana santa.
De vuelta a su templo, el Espíritu de la Gloria de Dios, navegando por las calles, se asomó un instante por las rendijas de la puerta de la iglesia. Sintió jaleo y preocupado, traspasó los muros y entró en la capilla de Santa María Madre y san Bernabé, la buena de Sara corría de un lado a otro, nerviosa con una ramita de olivo en la mano. Vamos, los cirios, la plata que esté limpia, los escudos, el palio, que brille el terciopelo granate más que nunca, tenemos que salir a la calle, que llevan tiempo esperándonos, y Ceuta necesita de la paz de sus ojos verdes, del rostro del Dulce Nombre de Jesús grabado en nuestras pupilas para confortar nuestras tristezas, el bueno de Israel se ha agarrado a la palmera porque en el retranqueo por poco lo suben con Zaqueo, y su Diputado Mayor de Gobierno está ansioso de penitencias y de ilusiones cofrades. Es espejo de la inquietud y el nerviosismo de tantas almas, que pusieron sus sueños, su devoción, y su fe en la mirada de un Jesús humilde que pronto galopará sobre Triburcia ganando la Plaza de África. Es la hora, es el tiempo de sanar las heridas de Ceuta que espera en la calle. Arriba valientes, siempre arriba, siempre de frente, seguid luchando por Ella y por aliviar el peso del madero de Jesús Nazareno, seguid metiendo riñones, metiendo el cuello y llevando a vuestras hermandades a lo más alto…
Pollinicos, pollinicos
Alzad al pecho los labios
Cantad hosanna al que viene
En nombre del Padre Santo
Pollinicos, pollinicos
Alzad al pecho los labios
Y cantad al Rey Manuel
Martinetes y quebrantos
Pollinicos, pollinicos
Alzad al pecho los labios
Echadle flor de romero
Tiradle canela y clavo
Almendra y flor de retama
cortadle palmas y ramos
mantolín bordao de luna
le chorrea por su brazo.
Miradlo sobre Triburcia
Con san Juan y sus hermanos
Entrando por la Gran vía
Rodeao por sus hermanos…
Atended, cofrades caballas, porque en verdad os anuncio, que últimamente se vienen bordando primores para una Reina, que en los meses pasados el papel se ha ido preñando de alabanzas de tinta fresca, que la que es de gracia llena ha ido provocando delirios de versos cuajados de bellezas, y como los pétalos de los piropos que un día tuve la ocasión de esparcir reposan ya entre las páginas del gran libro del tiempo pasado, ahora otras nuevas flores han brotado del sentimiento de quien estoy seguro, se consume en deseos por tomar la palabra, ese joven sacerdote, cofrade convencido, que el próximo Domingo de Pasión derrochará gracia y valentía para volvernos a recordar lo que todos conocemos, pero que nos gusta tanto volverlo a oir de la boca de un cofrade que arañe nuestras entrañas y nos haga vibrar en los arbores de una nueva primavera. Por eso cederé el lugar de los pregoneros elegidos, donde hace catorce años me aferré con la fuerza de mis recuerdos, para ser sustituido tras un largo relevo de heraldos de lo divino, por otro corazón que se vacie de amores, por otra voz que estremezca el silencio, y por otra alma embelesada que nos haga tocar el cielo con las manos cuando acaben los sones de Amarguras...
…Cada vez que pronuncio su nombre, Amargura, el corazón se me dispara y salta como un potro galopando de pasión. La gloria de Dios hecha hermosura y Celestial, Reina de un barrio que saldrá a las calles bajo distintas advocaciones y cortejada por distintos nazarenos, pero todos hijos de Ella, la que nos arropa, la que nos cuida, está siempre a nuestra vera porque duerme en nuestras parroquias en los verdes ojos de Madre de Dios de la Palma, en las manos de la Virgen de los Dolores, en la leve sonrisa de Niña Caridad, en las Penas de su Humildad, en el consuelo de su Esperanza, en sus Lágrimas purísimas, en el Desamparo de su corazón, en su Concepción Inmaculada, en su Mayor Dolor, en el Amor que nos regala, en su Soledad nunca sola y en su Piedad redentora. Vosotros queridos cofrades ceutíes, aunque no lo sepáis, estáis bendecidos. Aunque no os lo creáis, porque la fatiga os ahogue, estáis bendecidos. El aliento de Dios está con vosotros cada vez que alzáis la mirada a la cruz del Nazareno, cada vez que al acostaros cerráis los ojos al dormir en su dulce Nombre, cuando le besáis los pies cada primer viernes de marzo, cuando pasáis por delante de la iglesia y entráis un momento para verle, para pedirle, para darle gracias…

Vendrá ilusionado
con su noble canto
vendrá enamorado
de su dulce encanto
vendrá consolado
por su Amargo llanto.
Traerá entrecortada
la voz pregonera
y un verso esculpido
desde la escollera
será cirineo para su caída
y despertará su voz
nuestra alma dormida...

Dios te salve, Africana
los romances de su pluma
vienen a buscar el nombre
bendito de tu Amargura
nombre de llanto y de fragua
nombre de color de espuma
que aun penando en tu pureza
te recuerda tu amargura
y un pregón abre sus puertas
por cantar a la más pura
doncella que por los siglos
se hizo crisol de amargura
aquí está el verso a tus plantas
 y cariñosamente tuya
mi voz que a buscarte viene
desde Barbate sin dudas
de San Paulino a África
van dos devociones juntas
dos quereles, dos emblemas
y un amor que nos inunda
y tiene a Ceuta y Barbate
prendados de tu Amargura