Cinco inmigrantes subsaharianos continúan ingresados en el Hospital Universitario al presentar distintas heridas o lesiones producidas en
el salto a la valla, considerado como histórico por el cómputo global de personas que lograron pasar: más de 600. Tal y como ha confirmado Ingesa, había algunos inmigrantes en Observación a los que se preveía dar el alta. Finalmente tras valorar sus heridas se ha optado por mantenerlos ingresados, así que la cifra final de heridos que este viernes está en el HUCE es de cinco. Tres han pasado por quirófano, uno de ellos tuvo que ser escayolado por fractura y el quinto quedó ingresado por heridas de diversa consideración. Al CETI se han derivado los casos de otras personas lesionadas, pero que no revisten gravedad por lo que no han requerido su estancia hospitalaria, ya que no hay que practicar intervención alguna. Todos los guardias civiles que fueron atendidos en el Hospital recibieron el alta ayer, después de ser tratados sobre todo por las quemaduras producidas al recibir cal viva y ácido que eran arrojados por los inmigrantes.
El Hospital, saturado
El Equipo Directivo del HUCE tuvo que reforzar el Servicio de Urgencias con enfermeros de otras unidades para suturar las diversas heridas que presentaban tanto los inmigrantes como los guardias civiles, regresando posteriormente a sus respectivos puestos de trabajo, normalizándose la situación a lo largo de la jornada, y sin que hubiera que recurrir a la llamada extraordinaria de ningún profesional que no estuviese trabajando en ese momento. En quirófano hubo que suspender una intervención programada para atender las urgencias quirúrgicas no demorables que se presentaron.