El periodista y reportero gráfico Javier Sakona inaugurará este jueves por la tarde en el
Museo de Ceuta su
exposición fotográfica Ex Marginem, que se podrá visitar hasta el próximo 26 de marzo. Esta es su tercera exposición individual y surge “porque ya era hora”. Según ha comentado Sakona en los estudios de ‘La Mañana de
Cope de Ceuta’, “me dije, yo tengo que regalarme una exposición para mostrar este trabajo enorme, porque son miles de fotos de la que parte esta exposición que llevo haciendo en Ceuta desde que llegué”. Sakona es periodista y “también cargo con la cámara al hombro, pero no se esperen
fotografías de actualidad ni de paisajes de Ceuta. Voy en otro camino, aunque todas las fotografías se han tomado aquí”. Estas fotografías las ha ido sacando durante nada más y nada menos que 10 años. “Digamos que cuando salgo con la cámara por placer, por mi afición personal, en mis días libres a pasear, siempre me pongo objetivos. Durante muchos años he estado haciendo fotos de cartelería, haciendo un tipo de memoria tipográfica de muchas tiendas y comercios de Ceuta, muchos de ellos ya desaparecidos”.
Sobre ‘Ex Marginem’ ha asegurado que “no he hecho una exposición de calles de Ceuta, busco la belleza en el desgaste, en el paso del tiempo, eso es lo que me interesa. Los viejos edificios, esas callejuelas de Hadú o aquí mismo en el centro ese edificio por el que pasas todas las mañanas y nunca te paras a mirar esa ventana, aparentemente anodina que está ahí con las heridas del tiempo visible y que reivindico su belleza”. De este modo podemos decir “que esta exposición, que está dividida en dos partes aparentemente muy diversas, ese es el nexo que las une, la búsqueda de la belleza en el paso del tiempo. En lo desgastado, en lo a priori feo o fuera de los márgenes, por ahí va el título”, ha agregado el fotógrafo. Su objetivo es que “la fotografía transite por los márgenes de la propia fotografía, llegando incluso a un campo casi pictórico o por los márgenes de la mirada. Es decir, fotografiar aquello como un edificio del Príncipe en lugar del edificio Trujillo. También tiene su belleza, su reclamo. También por otro lado en los márgenes de la ciudad, dando vueltas por Los Rosales, por el Príncipe, el Recinto”. La ciudad es la protagonista de esta exposición, “aunque no es fotografía urbana, ni estampas de Ceuta. No busco paisajes pero tengo un mosaico de gran formato de casas de colores improbables que hay en el Príncipe. Para esa foto me habré pasado días y días dando vueltas por el
Príncipe, demostrando que se puede estar solo paseando sin que pase absolutamente nada”.
El color también es muy importante en esta exposición. “Para las fotografías del Príncipe tengo algunas en las que los colores son muy importantes y tengo algunas en las que el color está más brillante o no si da el sol o está la sombra”. Javier Sakona puede tener guardadas entre 3.000 y 4.000 fotografías de todos estos años y no había un modo de exponerlas todas. “Tampoco yo quería avasallar. Escoger algunas era difícil y por eso hay algunas, tres o cuatros fotos, que están en formato mosaico que es una manera también de ofrecer una visión global de lo que es la ciudad a base de impactos de color o de pequeñas estampas”. Asimismo, “tengo una fotografía que es un díptico con decenas de ventanas de toda la ciudad”. Cuando sale con su cámara Sakona sabe “lo que voy buscando” y se dedica a dar “vueltas y vueltas y hacer fotos. En el Príncipe he ido subiendo hoy voy a fotografiar casas verdes, casas rojas… Me pongo un objetivo y voy trabajando sobre eso”, y así ha visto la luz esta exposición.