Ha vuelto a pasar. De nuevo las narcolanchas como protagonistas y, a uno y otro lado, la Guardia Civil y los narcos. Canal Sur ha adelantado la muerte de un narcotraficante que iba en una semirrígida tras una colisión con la Guardia Civil a la altura de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz). La AEGC ya denunció hace unos meses en El Faro de Ceuta la situación de crisis que se vive en el Estrecho lo que lleva a una exposición al límite.
Además de esa muerte, dos agentes de la Guardia Civil han sufrido lesiones.
La colisión tuvo lugar en la desembocadura del río Guadalquivir durante un servicio de prevención del narcotráfico. "Los narcos abandonaron a su compañero herido, dejándolo sin asistencia en la orilla de Huelva", han señalado fuentes del instituto armado que recoge EFE.
Fueron los agentes de la Guardia Civil quienes le practicaron maniobras de reanimación y lo trasladaron a la patrullera, aunque finalmente falleció.
Quien ha perdido la vida era uno de los tres ocupantes de la narcolancha que iba a realizar un alijo en la desembocadura del río Guadalquivir, en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz). Impactaron lateralmente con una de las embarcaciones de la Guardia Civil.
Huida de los demás ocupantes
Los otros dos ocupantes huyeron hacia el interior del Coto de Doñana. Según han explicado fuentes de la Guardia Civil a Europa Press, los hechos se produjeron en la madrugada de este jueves, cuando una embarcación con tres tripulantes, que transportaba droga, fue interceptada por una embarcación del Servicio Marítimo de la Guardia Civil, llegando a colisionar lateralmente en un momento de la intervención.
Cuando los agentes llegaron hasta la embarcación, encontraron a uno de los tres ocupantes herido, por lo que comenzaron a hacerle maniobras de recuperación.
Posteriormente, lo trasladaron hasta la embarcación para arribar en la orilla de Sanlúcar donde finalmente falleció a pesar de las constantes maniobras de recuperación realizadas para intentar salvarle la vida.
Este suceso hace recordar el ocurrido en Barbate que terminó con la muerte de dos guardias civiles y el inicio de una cascada de detenciones que ha derivado en la entrada en prisión de tres personas por su presunta relación con los hechos.
AEGC ha puesto de manifiesto la peligrosidad que rodea estas prácticas y cómo las persecuciones pueden terminar de la peor de las maneras.
“A esos narcotraficantes les da igual hacer lo que hacen. Se han estrellado varias veces contra embarcaciones, luego esto se olvida y las condenas son mínimas”, indicaba la asociación tras los sucesos duros como el de Barbate.
Pronunciamiento de AUGC
“El accidente de dos guardias civiles contra una narcolancha pone de relieve la urgencia del reconocimiento como profesión de riesgo”. Este ha sido el pronunciamiento de AUGC tras lo ocurrido en Sanlúcar de Barrameda.
“Dos guardias civiles han resultado heridos en una persecución contra una embarcación de narcotraficantes, evidenciando la necesidad de mayor protección y derechos laborales para los agentes en zonas de alto riesgo”, han recalcado desde la asociación.
Y es que a raíz del grave accidente sufrido por dos guardias civiles en el río Guadalquivir frente a las costas de Bonanza (Cádiz), AUGC ha vuelto a poner de manifiesto “los peligros diarios que enfrentan los agentes en su lucha contra el narcotráfico, sin el respaldo ni la protección que brinda el reconocimiento como profesión de riesgo”.
Al respecto, la Asociación Unificada de Guardias Civiles han insistido en que “este accidente es un claro ejemplo de que los guardias civiles, especialmente aquellos destinados a operaciones de alto riesgo, se exponen cada día a peligros extremos en su lucha contra redes criminales violentas y organizadas, como la del narcotráfico”.
Lo más grave, “sus condiciones laborales” y que “los beneficios en caso de accidente o incapacidad no están a la altura de los sacrificios que realizan”.
AUGC ha asegurado que “a diferencia de otros cuerpos, los guardias civiles siguen sin estar reconocidos oficialmente como profesión de riesgo, lo que deja a los agentes en una situación de vulnerabilidad”.
“Nos resulta inaceptable que los agentes sigan enfrentándose a organizaciones criminales cada vez más peligrosas sin el respaldo adecuado”, ha criticado la asociación.
La Asociación Unificada de Guardias Civiles ha agregado que “las condiciones de los guardias civiles en lugares de alta conflictividad deben ser revisadas con urgencia, garantizando el acceso a equipos modernos, tecnología avanzada y formación adecuada que les permita realizar su labor en condiciones óptimas”.
Finalmente, el grupo ha exigido al ministro del Interior “que asuma su responsabilidad y avance en el reconocimiento de los guardias civiles como profesión de riesgo con carácter urgente”.
Cadena perpetua y se acabó la tontería ya!!!
Esto es el juego de gato y el ratón e igual que mueren unos mueren otros y ya está cada uno en su puesto de trabajo sabe a lo que se arriesga y punto y el que no le guste que trabaje en trabajos legales como hacemos todos y la G.C igual si no quiere riesgos a dirigir el tráfico de vehículos .