Román y Rabea hacen mención a sus familias, entre otras razones, para marcharse

• Román reflejó que también ha influido su salud y que jamás había consentido ninguna actividad delictiva

• Rabea Mohamed recordó que provenía de una familia humilde y que sus padres le habían inculcado siempre los principios de la honestidad y del buen hacer

Susana Román y Rabea Mohamed ya han dado sus explicaciones sobre los motivos que les han llevado a presentar sus respectivas renuncias al presidente Vivas de todos los cargos que ocupaban tanto en el Gobierno, como en la Asamblea, al igual que en el Partido Popular. Y entre esas razones, tanto Susana como Rabea han hecho referencia a sus respectivas familias. Mientras la que era consejera de Hacienda, Economía, Administración Pública y Empleo certificaba que “todo el mundo sabe que mi familia es una de las prioridades en mi vida y no tengo porque someterles a una presión que pueda evitar”. En este apartado, la que ha sido consejera de Educación y Cultura se ha explayado más. Decía Rabea que: “He tomado esta decisión a partir de los últimos acontecimientos acaecidos, que, sin perjuicio de que espero que se aclaren todas las cuestiones con respecto a mi persona cuanto antes, han hecho que opte por dedicarme a mi familia al cien por cien y dejar que sean otras las personas que hagan el trabajo público que venía yo realizando. Es muy duro para mí irme por esta causa habiendo trabajado toda mi vida con mucho esfuerzo y dedicación. Desde pequeña mis padres, de familia humilde, albañil de profesión mi padre y ama de casa mi madre, me han inculcado unos valores y principios de honestidad y buen hacer que son los que en todo momento han presidido mi conducta, que es la misma con la que intento educar a mis hijos”.  En otra causa igualmente relacionada con su persona, Román certificó que igualmente su salud había primado en la decisión de abandonar, puesto “afrontar el recorrido procesal en estas condiciones, dificulta asumir las responsabilidades del cargo, con el añadido a la presión de una investigación”.

En la alocución que Susana Román hizo ante los medios de comunicación en la sala de prensa del Ayuntamiento, donde se limitó a leer un comunicado y no admitió preguntas, alertó de que nunca se había planteado la política como una profesión o una vocación hasta mi jubilación. Vuelvo a mi profesión, todos los que me conoceis, sabes que me encanta y que regreso con la intención de buscar nuevos retos profesionales”.

Destacó que la Justicia tendría toda su colaboración y recordó que a lo largo de estos años dedicada a la vida póublica se había entregado “en cuerpo y alma a mi trabajo por la ciudad”. Una de sus frases más lapidarias durante la intervención fue para indicar que “nunca he consentido y tolerado ninguna actividad delictiva”.

Hizo un capítulo de agradecimiento hacia el presidente, sus compañeros de Gobierno, los funcionarios y las personas que más cercanas a ella habían estado en estos últimos tiempos, entre los que destacó a los directores generales, a sus dos secretarios y de manera especial al director general, Juan Manuel de la Torre.

Pidió disculpas si a lo largo de estos años había hecho daño a alguien, reconociendo que nunca había sido de manera intencionada y emplazó a todos los medios de comunicación a otra comparecencia, “esperando que sea pronto, cuando este mal sueño termine”.

Mientras Rabea, que explicó sus razones a través de un comunicado, reflejó que “esos valores y esos principios que me transmitieron mis padres son mi verdadero patrimonio, patrimonio que se me intenta arrebatar ahora y por ello quiero dedicar mi tiempo a colaborar, como siempre, con la justicia con el anhelo que esa honestidad y humildad no me sea arrebatada. Nací en una familia humilde y así me voy de la política, con mi humildad e igual que cuando llegué. En todo momento he ejercido mis cargos lo mejor que he entendido y con el ánimo de hacer el bien y en pro del interés común. Si alguna vez he cometido algún error en la gestión, pido disculpas a quienes les haya afectado de manera negativa. Jamás he cometido injusticia alguna a sabiendas o cualquier actuación fuera de lo que marca la ley”.

Quiso agradecer al presidente de la Ciudad la confianza depositada en “mi persona durante todos estos años, a los compañeros de Gobierno y a todos aquellos con quienes he trabajado durante esta etapa de mi vida, y en especial a mi compañera, amiga y hermana, Susana Román”.

En la sala de prensa se vivieron instantes de gran emotividad cuando terminó Román de leer su intervención.

JUNTAS

Dos íntimas amigas que se consideran hermanas

En el propio comunicado de Rabea Mohamed habla de Susana Román como “amiga y hermana”. Una amistad que se ha ido fraguando durante lustros y que la política ha unido. Lo que no pensaba ninguna de ellas es que el final de esa actividad pública les iba a llegar a la vez. Lo cierto, es que en todo momento, Rabea Mohamed estuvo acompañando a Susana Román en los minutos previos a la comparecencia de la misma ante los medios de comunicación en la sala de prensa de la Ciudad Autónoma. La estuvo escuchando y luego se fundió con la misma en una abrazo interminable. De la política, desde luego, han sacado una amistad para siempre.

ASISTENTES

Compañeros de muchos años

La vicepresidenta primara de la Asamblea, Rocío Salcedo, fue el único cargo institucional que estuvo en la despedida de Susana Román. Allí se encontraban igualmente gestores de Servicios, el director general de Presidencia o asesores del presidente Vivas. Un acto que duró cinco minutos escasos.

NO QUERÍA

Sin consejeros a petición propia

Aunque varios consejeros la telefonearon para decirle que querían estar con ella en su despedida, les pidió que no acudieran, porque entendía que el Gobierno de Ceuta está por encima de las circunstancias personales de cada uno. Al final de la lectura se emocionó Susana Román.

LA PESADILLA SE INICIÓ EL MIÉRCOLES DÍA 15

Una semana que, desde luego, quedará para siempre grabada en su memoria y que esperan tenga una final feliz

Han sido ocho días de verdadera pesadilla. Desde las primeras horas del miércoles día 15, en que a Rabea Mohamed la detienen en su despacho de la Consejería, continuando por la llegada de Román a las cinco de la tarde con sus abogado a la Comisaría. Luego, ambas salieron en libertad con cargos esa misma noche. Se entrevistan con el presidente en la mañana del jueves y le dicen que si hay problemas se marchan, pero las confirma en el cargo. Durante el fin de semana hablan y deciden que se marcharán y que se lo comunicarán al presidente cuando regrese del viaje a Madrid para entrevistarse con Martínez Maillo. El miércoles por la tarde le entregan las cartas de dimisión al presidente Vivas, ayer firman los papeles en la Secretaría General, luego, la rueda de prensa de Susana y el abrazo final.

EMOCIÓN

No pudo contener las lágrimas

Ya había llorado minutos antes de bajar la escalera que desde Presidencia accede a la planta baja del Ayuntamiento. Luego, en los últimos párrafos de su lectura de las razones que le llevaron a la dimisión, ya no pudo contener la emoción. Se le saltaron las lágrimas durante varios minutos.