El riesgo de perpetuar la pobreza y la exclusión social

Como cada 17 de octubre, la ONU conmemora el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza. La oficina estadística comunitaria ‘Eurostat’ publicaba esta semana un nuevo estudio en el que Ceuta volvía a encabezar el ranking de una de esas listas de las que nadie querría presumir: la del riesgo de pobreza y la exclusión social.

La ciudad autónoma se sitúa con la tasa más alta en 2023. En concreto, se proclama como la primera de la lista con un 41,8%, lo que supone prácticamente casi la mitad de la población ceutí. Se lleva el palmarés, por delante de Andalucía y Melilla, y doblando la media europea, del 21,4%.

Somos conscientes de que los Planes de Empleo no son la solución, pero también somos responsables de que esos parches signifiquen el único sustento económico de tantas familias. Y sin el Plan de Empleo de Delegación del Gobierno, el Plan de Empleo de la Ciudad se queda cojo. El itinerario laboral dependiente del Gobierno de la Nación estará operativo para antes de que finalice el año según el responsable del SEPE en Ceuta. Sin embargo, a dos meses y medio de esa fecha, la ciudadanía sigue desconociendo el número de puestos de trabajo, las categorías, la duración o el presupuesto destinado a ello.

La ciudadanía necesita unas políticas sociales realistas, pero enfocadas a abandonar la situación de vulnerabilidad. Y si la Consejería de Servicios Sociales de la Ciudad Autónoma de Ceuta no comienza a trabajar con las familias para conocer de forma pormenorizada las diferentes realidades sociales, la administración pública corre el riesgo de convertirse en meros dispensadores de ayudas.

Porque las administraciones están para trabajar por la ciudadanía. Esa es una de las premisas del MDyC y así lo hemos puesto de manifiesto con la creación de una partida para Talleres de Empleo para personas de entre 30 y 45 años por 700.000 euros.

El programa se llama ‘Trabajando para ti’ y el objetivo es que las personas que llevan tiempo en situación de desempleo, puedan formarse y cualificarse. Un proyecto piloto que, si sale bien, vamos a solicitar su aumento de cara a los Presupuestos de la Ciudad de 2025. Porque nuestra prioridad es fomentar la inserción laboral para que algún día estas familias puedan salir de la situación de vulnerabilidad.

Sin embargo, aún queda mucho por hacer en materia social y los retos para evitar la exclusión social son cada vez mayores. Desde el MDyC continuaremos aportando nuestro grano de arena para combatir las desigualdades sociales.