El niño que ha estado a punto de morir ahogado en la playa del Chorrillo ha sido evacuado en helicóptero a la UCI pediátrica del Hospital Puerta del Mar de Cádiz. Así lo han confirmado a este periódico fuentes sanitarias. El pequeño se encontraba en la orilla de la playa del Chorrillo cuando, según ha informado Marsave, fue visto durante unos segundos "boca abajo" en el agua. "Uno de los socorristas se tiro al agua para recoger al chico y comenzar una rápida intervención para salvarle la vida", relata uno de los socorristas. Por otro lado, un ciudadano, testigo de los hechos, ha explicado que quien ha sacado al pequeño del agua no ha sido ningún socorrista de Marsave sino un ceutí
que se encontraba en el lugar y que se llama Kiko Oliva. Se trata de un enfermero militar del RAMIX 30. Al parecer, tras una llamada telefónica, "el enfermero militar se encontraba en el lugar de los hechos y fue él mismo el que practicó la reanimación cardiopulmonar", explica el testigo de los hechos. Tras practicarle la RCP, fue llevado hasta el puesto de socorrismo, donde se personó Leopoldo Domínguez, neumólogo, y ayudó al pequeño a estabilizarlo. "Llegue al puesto y me encontré al niño con un llanto muy diferente al llanto de un niño de dos años, se le posicionó y le dimos oxígeno para aumentar los niveles de saturación". Esto quiere decir que la saturación de oxígeno en la sangre estaba en un 55% por debajo de lo saludable, siendo el 95% y el 100% lo normal para una persona.
La ambulancia del 061 lo recogió y lo traslado hasta el HUCE
El menor fue trasladado al
Hospital Universitario de Ceuta por la ambulancia del 061 que se personó en el lugar de los hechos tras recibir el aviso de emergencia, y por el momento su pronóstico es reservado. "Ha vomitado hasta tres veces, se encontraba en una saturación del 40%. "Una vez que ingresó en la ambulancia del 061, la saturación subió hasta el 80%, asegura uno de los testigo presenciales". Fuentes sanitarias informan que el niño llegó con hipotermia al hospital. Los hechos ocurrieron alrededor de las 19.00 horas de este sábado. Una vez en el clínico ceutí se ha decidido su traslado en helicóptero a la UCI pediátrica del Hospital Puerta del Mar de Cádiz. Las 48 horas posteriores al ahogamiento son cruciales para evitar complicaciones tardías como arritmias severas o edema pulmonar. La rápida actuación por parte de Kiko Oliva, del equipo de socorristas, de Leopoldo Domínguez y del equipo sanitario de la ambulancia del 061 han evitado una desgracia mayor.