“El Grupo de Regulares de Ceuta nº54, que orgulloso ostenta el nombre de esta Noble Ciudad, la que ha sido su casa durante los últimos cien años”, dijo ayer durante su alocución el coronel jefe de la unidad, Sebastián Vega Murcia, “se ha vestido de gala para rendir un emocionado recuerdo a quienes sirvieron en él”.
De tal manera, la extensa familia Regular se dio cita en la tarde de ayer en el acuartelamiento González Tablas para conmemorar una efeméride, la concerniente al aniversario número 103 de las Fuerzas Regulares, creadas por tanto el 30 de junio de 1911, que supone un motivo de orgullo no sólo para el ámbito castrense sino para el conjunto de la ciudadanía, de antes, de hoy, de mañana. O sea, de siempre.
La tarde brillante iluminó un patio que estaba, literalmente, lleno hasta la bandera porque además de efectivos de la Unidad, se encontraban numerosos familiares, amigos, antiguos y emblemáticos efectivos e invitados que bien de pie, bien sentados en las graderías ubicadas para la ocasión, siguieron con atención y deleite la secuencia de los actos programada.
Entre los presentes destacó asimismo la presencia de autoridades civiles, con el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, y el delegado del Gobierno, Francisco Antonio González Pérez, a la cabeza; y autoridades castrenses, entre las que se hallaban el teniente general y jefe de la Fuerza Terrestre, José Ignacio Medina Cebrián, quien presidió el acto, el comandante general de Ceuta, José Manuel Sanz Román, y el coronel delegado de Defensa de Ceuta, José Manuel Naviera Gómez, quien vivió una jornada especialmente emotiva pues se despidió de la bandera de Regulares después de siete años, ocho meses y trece días en el cargo.
Al poco de que la reloj diera las 20:00 horas se desplegaron ante el público las unidades participantes, comandadas por el propio Vega Murcia: Mando y Plana Mayor del Grupo de Regulares de Ceuta nº 54; Escuadra de gastadores de Grupo y Tabor; nuba del grupo de Regulares de Ceuta nº54; unidad de música de la Comandancia General de Ceuta; mando y ‘PLM’ del Tabor Tetuán I/54 y cinco compañías del Tabor Tetuán I/54.
A continuación, se incorporaron a la formación los guiones del Grupo de Regulares Nº54 y del Tabor Tetúan, eso fue justo antes de que las unidades rindieran honores a la bandera del grupo, trasladada y ubicada hasta su puesto en formación. Antes de que sonaran los acordes del himno nacional, se hizo el silencio en el patio del acuartelamiento y adoptaron posturas rígidas, con la mirada al cielo, cada uno de los militares presentes.
La formación rindió entonces honores a la autoridad que presidió los actos, Medina Cebrián, y que sirvió como antesala a los momentos de mayor calado emocional de toda la ceremonia, aquellos momentos en los que se reconoció la extraordinaria labor a diversos efectivos. Así se procedió a la entrega de condecoraciones al personal militar que se ha hecho acreedor de tal distinción, concedidas por orden de importancia y relación. En este sentido, cabe destacar que un integrante del Grupo hizo entrega a la madrina de la bandera de Regulares, María Dolores Puya, esposa del alcalde, de un ramo de flores.
Asimismo, y como una forma más de reforzar los lazos que unen al Grupo de Regulares con las diferentes Hermandades, se concedieron las siguientes becas escolares a hijos de personal de tropa: la Hermandad de la Vera Cruz de Setenil de las Bodegas concederá dos becas; la Hermandad del Cautivo de Málaga dará una; y la hermandad de la Encrucijada de Ceuta concederá otra.
“Cuando esta jornada de celebración toque a su fin”, dijo el coronel jefe Vega Murcia, “y el recuerdo de lo que en ella hemos vivido sea eso, sólo un recuerdo, concentraremos nuestra atención en un nuevo año de nuestro particular calendario”, un tiempo por vivir en que Regulares volverá a escribir Historia de España.
Medina Cebrián y Naveira Gómez, protagonistas
El teniente general y jefe de la Fuerza Terrestre, José Ignacio Medina Cebrián, y José Manuel Naviera Gómez, coronel delegado de Defensa de Ceuta, fueron los dos protagonistas más destacados del acto de aniversario. El primero porque presidió el acto y el segundo vivió una jornada especialmente emotiva pues se despidió de la bandera de Regulares después de siete años, ocho meses y trece días en el cargo. El coronel Naveira además sirvió durante ocho años y diez meses en Regulares durante el empleo de capitán entre las fechas 23 de febrero de 1981 y 12 de diciembre de 1989. Ambos tuvieron el privilegio de depositar la corona en honor de los soldados de todos los tiempos que, encuadrados en los Ejércitos de España, un día lucharon con valor, sirvieron con lealtad y murieron con honor.