El Consejo Escolar del Estado (CEE) urge al Ministerio de
Educación y Formación Profesional (
MEFP) y a los Gobiernos de Ceuta y
Melilla en su ‘Informe sobre el Estado del Sistema Educativo 2019’ a “ampliar la oferta de plazas públicas en los dos ciclos de Educación infantil, ya que la baja escolarización, su elevado número de estudiantes por aula y el hecho de que una parte de este alumnado cuenta con lengua materna específica (dariya y tamazight, respectivamente) recomiendan una atención específica con más medios y cupo de profesores”.
El dictamen incluye una separata especial dedicada a las dos ciudades autónomas con casi 50 páginas en la que se recuerda que “el impulso de la Educación Infantil, particularmente en los entornos socialmente desfavorecidos, constituye una de las políticas favorecedoras del éxito escolar, pero Ceuta y Melilla presentan una tasa baja de escolarización en el primer ciclo de 0 a 3 años de edad con respecto a la media del conjunto del territorio nacional.
El caso de Ceuta es especialmente alarmante, pues su tasa neta de escolarización desde los 0 a los 2 años de edad no pasa del 13,3%, nueve puntos por debajo de la de Melilla (22,6%). La media nacional se sitúa en el 38,2% y llega al 53,8% en el País Vasco.
Del análisis de las ratios en el curso 2017‑2018, al que corresponden los últimos datos cerrados, para cada una de las edades comprendidas, en las dos ciudades se aprecia “que la falta de centros y unidades públicas incide en la situación, según la cual para los menores de un año las diferencias con la tasa española (12,3 %) estuvieron por debajo de los 10 puntos porcentuales (diferencia del 10,7 % para Ceuta y del 7,0 % para Melilla)”.
Estos valores crecen para la edad de un año, al presentar Ceuta una tasa del 9,1 % y Melilla un valor del 20,1 %, lo que supone unas diferencias respecto a la tasa nacional del 31,1% y del 20,1%, respectivamente. En cuanto a la edad de 2 años, la tasa neta de escolaridad en Ceuta alcanzó el 28,4 % y en Melilla un 40,4 %, valores que “resultaron inferiores al compararlos con la tasa de España: un 31,7 % en Ceuta y un 19,7 % en el caso de la ciudad hermana”, según las conclusiones del análisis del órgano consultivo.
Una adecuación “especialmente difícil” de las ratios
Las “singulares características” de Ceuta y Melilla, que según el CEE se concretan “en la dificultad de las administraciones locales para encontrar espacios que pudieran ser destinados a la creación de centros escolares” y en “la aparición de bolsas de escolaridad en función de la inmigración”, hacen “especialmente difícil la adecuación de las ratios a las cifras deseables”. El número medio de alumnos por unidad en el segundo ciclo de Educación Infantil era en Ceuta y Melilla en el curso analizado de 24,0 y 28,7, respectivamente (17,6 en Extremadura, región líder). De 0 a 2 años, de 15,1 y 16,5, el doble que en Baleares (8,1).
“Que ningún niño pase de 2º de Primaria sin saber leer o escribir”
El Consejo Escolar del Estado (CEE) vuelve a recomendar al Ministerio de Educación y Formación Profesional en su informe de este año “que elabore, en el marco de los objetivos para el 2030, un Plan integral de actuaciones en Ceuta y en Melilla, para equiparar sus recursos educativos y sus resultados escolares a la media estatal y europea”. A juicio del órgano consultivo, dicho Plan “debería prever, entre otras, medidas de choque para garantizar que ningún alumno salga de segundo de Educación Primaria sin el conocimiento de la lectura y escritura”.
En la misma línea, el dictamen reclama de la Administración competente que en su territorio de gestión “amplíe la oferta de plazas públicas y el cupo de profesores en Educación Primaria para reducir el altísimo número de estudiantes por aula, en lo más alto de todos los ámbitos territoriales (superando el máximo legal permitido por la ley, e incluso muchas unidades de Melilla por encima de 30 alumnos por aula), sabiendo, además, que parte de este alumnado cuenta con lengua materna específica, lo que debería recomendar una atención específica con más medios y cupo de profesores”.
En términos casi idénticos se reproduce la misma petición para Secundaria “para poder reducir el número de estudiantes por aula y mejorar las tasas de abandono escolar temprano y el número de titulados”.