Michael Jordan dijo: “He fallado una y otra vez, por eso he tenido éxito”. Cada cual podrá interpretar esta frase de una forma u otra y cada uno tendrá su visión de lo que es el éxito y el fracaso. Porque hay que saber gestionar las emociones para triunfar en cualquier ámbito de la vida y el deporte no es una excepción.
Todos estos aspectos son los que se trataron en la conferencia sobre psicología deportiva que impartió el psicólogo Claudio Alarcón, poseedor de un máster en psicología deportiva, en el Biblioteca Pública y organizado por el Colegio de Psicólogos de Ceuta.
Tras la presentación de esta rama de la psicología en donde Alarcón trató que los presentes la diferenciaran de la clínica, pasó a explicar las principales técnicas que se aplican para que los deportistas obtengan mejor rendimiento, porque si el cuerpo se entrena, la mente también lo hace.
Para poner en valor este importante entrenamiento, el del plano psicológico, Alarcón hizo hincapié en su diferencia con la psicología clínica y en quitarle el estigma que tiene asociado. El ponente puso ejemplos prácticos poniendo como referencia al trabajo psicológico que lleva a cabo un deportista de élite como Fernando Alonso. Una exposición visual a través un vídeo.
En la última parte de la ponencia, Alarcón puso en valor esta trama de la psicología con el trabajo que el propio Claudio pone en práctica con la Federación ceutí de Gimnasia Rítmica. Un trabajo muy satisfactorio para ambas partes porque llevan manteniendo esta relación profesional varias campañas.
Pero, ¿qué es y para qué sirve la psicología deportiva? Esta rama de la psicología puede mejorar tanto las capacidades y aptitudes de los deportistas, así como servir de unión entre cuerpo técnico y jugadores, ayudando de esta manera a que éstos últimos adquieran una formación basada en valores como deportistas y aprendan a disfrutar del deporte.
También trata la fisiología del estrés y rendimiento deportivo para poder convertir ese estrés en un aliado. Porque el estrés, la ansiedad o el nivel de activación no deben ser excusas para los fracasos deportivos.
¿Cuántas veces hemos escuchado a deportistas y entrenadores hablar de errores de concentración, falta de intensidad o de no saber competir? Todas esas carencias no se entrenan corriendo. Un elevado porcentaje del del éxito en la vida depende de la fortaleza mental, y más aún en el deporte.
Una vez que un deportista tenga bien trabajada tanto la parte técnica como la física para su deporte, es fundamental que trabaje la parte mental si quiere seguir avanzando.
En el caso de deportes individuales, la parte psicológica juega un papel fundamental, hasta el punto en que si quiere ser el mejor una buena mentalidad es imprescindible. En este caso suele ser el mismo jugador, o en ocasiones el entrenador, el que acude a la ayuda de un psicólogo.
No hace falta estar mal o ser necesariamente jugador profesional para acudir al psicólogo deportivo, la clave está en querer ser y estar mejor y así minimizar la diferencia entre lo que el jugador sabe que puede hacer y lo que hace, sacando máximo potencial y disfrute de su juego.
Pero la psicología deportiva no sólo es fundamental para los deportes individuales. Para cualquier actividad es necesaria una buena preparación mental y más aún en deportes colectivos, ya que ningún equipo es más fuerte que el más débil de sus miembros que lo componen.
En el caso de lo deportes colectivos suele ser el cuerpo técnico el que pide ayuda al psicólogo y después se trabaja conjuntamente con los jugadores.Un entrenamiento, el psicológico que suma al resto de trabajos específicos que el deportista lleva a cabo y que le hace crecer en muchos aspectos.