El
Juzgado de guardia en Ceuta dictó ayer auto de entrada en prisión para el único detenido, hasta el momento, en el marco de la investigación abierta por la Policía Nacional
tras el disparo que dejó herido a un menor de 17 años. Todavía no se ha localizado al autor del mismo, plenamente identificado por el
CNP, pero sí se ha arrestado a uno de sus hermanos por su presunta participación en hechos previos y posteriores a este caso.
Esa detención, según las fuentes consultadas por El Faro de Ceuta, se practicó el día 24 y fue ayer cuando se le presentó en el juzgado por tres delitos: uno de lesiones con instrumento peligroso, otro de robo con violencia y un tercero de tentativa de homicidio, por los que se ha interesado su ingreso de forma preventiva en la prisión de Mendizábal.
Según las investigaciones policiales el episodio, que terminó con el menor herido de rebote por una bala que no iba dirigida contra él, tiene de trasfondo previo un enfrentamiento entre estos dos hermanos y una tercera persona -que era a la que en realidad querían disparar- que viene arrastrándose desde hace tiempo. Primero, el ahora encarcelado discutió con esa víctima hace tres semanas causándole lesiones con uso de cuchillo. Días más tarde, y ya en compañía de su hermano, volvieron a encontrarse con la víctima en las proximidades del Poblado Marinero, en donde le robaron haciendo uso de violencia tanto su teléfono móvil como 150 euros.
Así se llegaría a la tarde del lunes, cuando el pistolero fugado y la víctima volvieron a encontrarse en el Príncipe, lo que fue aprovechado por el primero para sacar un arma y dispararle. Quería alcanzarle el rostro pero la bala terminó rebotando e hiriendo a un menor de edad que tan solo acudía a una tienda cercana a comprar pan.
Esa misma noche del disparo volvió a suceder otro episodio de agresión más, aunque el mismo no trascendió a los medios de comunicación. Mientras la Policía Nacional trataba de localizar al pistolero, este junto a su hermano volvieron a toparse con quien es objetivo permanente de sus agresiones lesionándole con empleo de cuchillos en zonas que, según han valorado los médicos cuando acudió a Urgencias del Hospital, son vitales.
La Policía ha detenido de momento a quien parcialmente está implicado en este rosario de agresiones que van todas dirigidas a la misma víctima, pero no han conseguido dar con su hermano, autor del disparo que a punto estuvo de provocar una tragedia. La bala alcanzó la zona dorsal del menor porque rebotó, pero los médicos señalaron que podía haberle alcanzado algún punto vital.
La persona a quien realmente persiguen ya ha prestado declaración ante la Policía Nacional.
El menor herido de bala recibe el alta médica
El menor de 17 años que resultó herido de un disparo en la tarde del pasado lunes ya ha recibido el alta médica, tal y como confirmaron a este medio fuentes de Ingesa. Después de que el día 24 se acordara, a modo de prevención, trasladarlo desde el área de Traumatología a Cirugía; ayer mismo se le dio el alta médica después de verificarse que no cabía complicación alguna de su estado y dada la evolución experimentada. Él es la víctima de un disparo accidental, de un disparo que no iba dirigido contra su persona y que recibió cuando acudía a comprar el pan. La bala -que ‘tenía otro nombre’- le alcanzó de rebote, causándole una herida con orificio de entrada y salida en la parte dorsal, sin que llegara a afectar a ningún órgano, hecho que fue destacado por los médicos del servicio.
Un amigo le trasladó con urgencia debida al Hospital Universitario en donde se le ingresó directamente en Observación. Los hechos han conmocionado a los vecinos de la barriada que ven con inquietud cómo la presencia de individuos con armas puede derivar en situaciones como la ocurrida, con personas inocentes que terminan siendo víctimas.