A prisión el ceutí detenido en Loma Colmenar por sus vínculos radicales

• Se negó a declarar y se ha ordenado su ingreso en la cárcel sin fianza por orden del juez De la Mata

El joven detenido el pasado miércoles en Loma Colmenar, en una operación desarrollada por la Policía Nacional y enmarcada en la lucha contra el radicalismo, ingresó ayer en prisión sin fianza por orden de la Audiencia Nacional, después de su puesta a disposición del titular del juzgado central número 5. Esta misma decisión se adoptó para otro detenido ese mismo día pero en Alicante, acusados los dos de formar parte, presuntamente, de la organización Daesh y ejercer labores de captación y adoctrinamiento para ese grupo.

En el caso del ceutí arrestado en una de las 317 VPO que ocupaba en el barrio, se le acusa de integración en organización terrorista, adoctrinamiento, autoadoctrinamiento y enaltecimiento del terrorismo, según confirmaron fuentes de la Audiencia Nacional a los medios de comunicación. No se ha difundido el auto al igual que ha pasado en otras situaciones similares.

El arrestado se negó a declarar ante el juez José de la Mata y se le acusa de llevar a cabo labores de reclutamiento a través de las redes sociales, intentando convencer a sus víctimas en su coche de luchar para el autodenominado Estado Islámico, de acuerdo con las investigaciones presentadas por el CNP y avaladas por los agentes de la Comisaría General de Información y la Brigada de Ceuta.

Según las mismas fuentes, el arrestado frecuentaba una tienda que regentaba uno de los detenidos en la operación de febrero de 2016 en Ceuta, el joven Hmido quien se le acusó de combatir en Afganistán y estuvo retenido en la base de Guantánamo, quedando después absuelto de todos los cargos por parte de la justicia española en sentencia firme que dictó el Tribunal Supremo. Además al detenido se le relaciona con los arrestados en noviembre del año pasado, periodo en el que a él no se le detuvo pero sí se le investigó. Su mujer sí que estuvo detenida en 2015 por supuestamente captar a mujeres a través de redes, estuvo un tiempo en prisión para ser puesta después en libertad con cargos.

Según el Ministerio del Interior, el detenido constituía una pieza esencial en el aparato de captación y adoctrinamiento del Daesh y formaba parte de una red salafista-yihadista establecida en el barrio del Príncipe que ya había sido desarticulada de forma parcial el pasado noviembre con la detención de cuatro de sus integrantes más destacados.

El joven además había declarado a su círculo más cercano que quería trasladarse a zonas de conflicto para combatir como un ‘muyahidín’, pero que para no despertar sospechas se marcharía antes a residir en Marruecos o Bélgica.

En cuanto al detenido en Teulada (Alicante), de 46 años y nacionalidad egipcia, ingresó ayer en prisión por orden del magistrado Eloy Velasco por delitos de pertenencia a banda terrorista, adoctrinamiento activo, financiación del terrorismo y enaltecimiento.

Según Interior, la misión del hombre para el Daesh era proveer de refugio en España a terroristas que decidían abandonar Siria e Irak, proveyéndoles de los lugares necesarios de tránsito y refugio, fundamentalmente en España, así como auxiliándoles en las labores de documentación y obtención de recursos económicos.

Familiares y amigos niegan las acusaciones

A través de las redes sociales, familiares y amigos del detenido niegan cualquier relación del mismo con los hechos que se le imputan. Aseguran que no está relacionado con las prácticas radicales o que tenga vinculaciones con los círculos del Daesh. En los distintos mensajes que han dejado escritos en las redes sociales insisten en que cuando se celebre juicio se sabrá la verdad y su familiar, vecino o amigo, según el caso, quedará libre. El mismo día del arresto, varios conocidos del joven, de 29 años, se aproximaron al cordón policial establecido para manifestar públicamente que nada tenía que ver con las acusaciones que ese mismo día hacía públicas el Ministerio de Interior. En el operativo participaron unidades de todo el Cuerpo policial, desde las que llevaban la investigación hasta todas las que prestaron apoyo.