Preparémonos para la indignidad

Visto el espectáculo de la toma de posesión de los elegidos a representar a los ciudadanos españoles en el circo de la señorita Batet, independentista ella, en el que cada uno de ellos, jura o promete los menos, o indecentemente dice lo que le sale de donde usted y yo sabemos sin que esta presidenta se le caiga la cara de vergüenza dando por válidas todas las fórmulas de acceso , ya sea al trapecio, a la jaula de los leones, a la partida de los payasos o a la de los magos ilusionistas, teniendo en cuenta que el tribunal ese que anda por ahí constitucionalizando, pero poco, ya ha señalado que todo es válido menos meterse con el circo. Así a unos les ha dado por jurar por la república catalana, a otros por las trece rosas, y otros por los presos, aparte de los discursitos absurdos de gente absurda que jamás se ha visto ante tan alta postura y los españoles en tan baja. Un circo de indignidad, que es lo que este parlamento desde ahora ofrece a los españoles. Una vez instalado el circo, como no es difícil imaginar en cada una de las funciones del mismo, lo que de ahí pueda resultar será de todo menos leyes beneficiosas para nuestra Nación.

Pero si esto sucede en el parlamento de los diputados (permítanme que a partir de ahora siempre lo escriba en minúsculas), lo que está por venir no será solo un circo de indignidades, será un mar al que habrá que acostumbrarse, claro también tendremos que ser más conscientes de lo que nos jugamos y actuar en consecuencia cada uno dentro de la ley pero con todas las armas que esta permita a la sociedad civil. Las olas de este mar van a sacudir el consejo de ministros, los altos tribunales, el consejo general del poder judicial, las instituciones públicas , las empresas públicas, la Administración General del Estado y como no a la Monarquía.

La conformación de un gobierno donde, si se confirman los pronósticos, se dará entrada a comunistas e independentistas o aunque solo sea a comunistas pero con el apoyo de los independentistas es ya de por sí, una vergüenza nacional. El partido comunista es un partido revolucionario, por lo que va a intentar en cualquiera de las parcelas de la administración subvertir el sistema constitucional del 78. Este partido está fuertemente financiado por las dictaduras comunista de Venezuela, Cuba, Rusia e Irán, todas ellas fuertemente opositoras al sistema capitalistas, de protección de derechos humano que nos ha dado la civilización occidental a la que pertenecemos. La indignidad de este partido comunista llega a solicitar, y el Vacío a conceder cual gobierno bananero, al matrimonio dentro del consejo de ministros, dentro del “colócanos a tós” socialista que tantos frutos ha dado. Así tendremos al macho alfa de los predios de Galapagar en una vicepresidencia al modo folk, tejanos y zapatillas incluidas en su ajuar permanentemente “casual” y a la zarina , también de los mismos predios, como ministro de igualdad, lo que claramente quiere decir que igual le da un ministerio que otro, el caso es que la coloque. Así todas sus cuitas matrimoniales podrán resolverse en el mismísimo consejo de ministros, ¿para que perder el tiempo en llegar hasta el casoplón de Galapagar?. Hay que tener en cuenta que ya no se desplazarán en el mismo coche que les llevaba desde el chalet a la odiosa ciudad de Madrid, con tanto tráfico, ahora han de viajar en coches diferentes, uno por ministerio claro todos ellos del Parque Móvil Ministerial.

Claro que si vergüenza en un país europeo es que una pareja de buscavidas se sienten en el consejo de ministros, lo que se avecina con las políticas que desarrollen, es todavía el mayor agravio. Estos personajes estarán día y noche en todos los medios de comunicación, ya que la propaganda la saben utilizar como no está escrito. Y los pilares de familia, propiedad, justicia, educación y vida serán los primeros en ser forzados. Estos pilares serán también propulsados por el resto de la camada comunista y con los aplausos de la socialista.

Pero si vergüenza da la sociedad de socialistas y comunistas la coyunda con los independentistas será motivo más pronto que tarde de salir a la calle para manifestarnos .Porque aquí se trata de la unidad de España, y esto ni un grupo de dementes catalanes ni de socialistas por mucho que le gusten volar en el Falcón al Vacío, ha de ser permitido.

El mero hecho de ir a consultar a un preso de sedición, enviando por delante a agentes sindicales y al comunista de Galapagar para posteriormente iniciar una reunión donde se hable de la partición de España, ellos dirán que dentro de la Constitución y de un referéndum para irse y no volver es para , si existiese una Fiscalía General del Estado y ejerciese las competencias que le ordena la ley, imputar al presidente en funciones de traición a España y a su Constitución. Estando ya prevista la suelta de los golpistas para antes de la Navidad y la posible bendición del payaso mayor Puigdemont para que pueda regresar sin mácula, gracias a la omnipotente justicia europea, (aquí como comprendo al pueblo británico) y al permanente complejo de la española, que es la única que debe prevalecer, la ignominia nos va a llegar por todas partes, por el norte por el sur, y como no desde dentro de las instituciones.

Los funcionarios de la Administración General del Estado, que han tenido que realizar duros exámenes de oposición a sus plazas se verán sometidos a la indignidad de los políticos que dirijan sus ministerios y que sin conocer un solo ápice de lo que es y significa la Administración Pública se permitirán el lujo de dar clases de ignominia, que es de lo único en lo que son doctores, eso sí abusos sin regla habrá por doquier.

En mi reciente estancia en Inglaterra he tenido ocasión de ver y sentir el respeto del Gobierno de Su Majestad a la Reina. Y también el respeto que ese Gobierno tiene a las decisiones o insinuaciones de la Reina, que reina pero no gobierna, pero que indudablemente tiene un gran poder, todo lo indirecto que se quiera. Nuestro Monarca debe ofrecer una cara menos amable cuando de trocear España se trata, cuando se habla de plurinacionalidades por el actual presidente del gobierno o cualquiera de sus ministros, y por ejemplo insinuar la ilegalización de todos los partidos que , debiendo ir a consultas con el Soberano, declinan desobedeciendo lo establecido en la Constitución. Es hora de hacer frente con todas las fuerzas del ordenamiento directas e indirectas a la partición de España por unos pocos, a la desaparición de la monarquía por unos pocos, a la desaparición de la Constitución del 78 por unos pocos. Creo que hay motivos suficiente para reformar la Constitución y la Ley Electoral y muchas otras instituciones así como fijar las competencias exclusivas del Estado sin posibilidad alguna de ser cedidas a las Comunidades Autónoma, como las de Educación, Interior y Justicia, así como de eliminar la adjetivación de nacionalidades y regiones y la supresión de los fueros vasco y navarro para avanzar en la igualdad de todos los españoles, algo que no hará ningún ministerio comunista de igualdad.

Todo lo anterior con el desgobierno que se avecina es completamente imposible de realizar, porque la mezquindad que nos preside solo tiene tiempo para mirarse en el espejo. Pero cuando esta etapa de indignidad termine, porque de esto estoy seguro, espero que los partidos ahora menospreciados por la izquierda, de la derecha, hayan tenido tiempo de lamerse sus heridas, de pensar donde se han equivocado, y además de alejarse de toda corrupción , centrarse en conseguir un frente común para realizar las transformaciones necesarias para ir progresando como nación (no confundir con el “progreso” socialista), algo que el necio Rajoy pudo conseguir.

Mientras preparémonos para la indignidad que se avecina y enfrentémonos a ella acudiendo a todas las manifestaciones donde seamos llamados y fuerte y claro expresemos nuestro parecer contrario a la desaparición de nuestras tradiciones, nuestras costumbres nuestra historia y nuestra cultura, allá donde sea motivo de negación. Ya sabemos dónde está el origen y quién y quienes son los culpables de tanta indignidad, seamos resistentes activos en todos los foros a los que acudamos y nos encontremos. Nadie merece soportar tanta indignidad.