Señores del periódico,
Me dirijo a ustedes para expresar mi preocupación acerca de una situación peligrosa que afecta la seguridad de los viandantes en nuestra ciudad. En el paseo de Marina Española, número 10, a la altura de la clínica Septem, existe un paso de cebra que presenta serios riesgos. Aunque al cruzar del paseo hacia la acera se dispone de visibilidad, el trayecto inverso, es decir, desde la acera hacia la calle estrecha, se convierte en un peligro constante. Los vehículos estacionados en la curva obstruyen la visión tanto de los peatones como de los conductores, lo que provoca que, en muchas ocasiones, estos últimos no reduzcan la velocidad o se detengan, aun cuando la señalización del paso de peatones es clara.
Como madre que transita a diario con un carrito de bebé, he experimentado personalmente la necesidad de asomarme con extrema precaución antes de cruzar. Lamentablemente, es habitual que uno o dos coches pasen sin detenerse, disculpándose con un gesto tardío. Esta es una situación inaceptable que pone en peligro a todos los peatones, en especial a los más vulnerables, como niños y personas mayores.
Entiendo que no soy experta en seguridad vial, pero considero que una medida efectiva podría ser la prohibición de estacionar en un tramo de dos o tres vehículos contiguos al paso de cebra, lo cual aumentaría la visibilidad y reduciría considerablemente el riesgo de atropellos.
Confío en que las autoridades correspondientes tomen en cuenta esta sugerencia antes de que ocurra alguna tragedia que todos lamentaríamos.
Agradezco su atención y comprensión.
Atentamente,
Una vecina de la calle García preocupada por la seguridad de sus conciudadanos.