Noticias

Pregón del Carnaval de Ceuta 2018, por Víctor Fernández

[et_pb_section bb_built="1"][et_pb_row][et_pb_column type="4_4"][et_pb_gallery _builder_version="3.0.64" show_title_and_caption="off" show_pagination="off" gallery_ids="265081,265080,265079,265078,265077,265076,265075,265074,265072" fullwidth="off" orientation="landscape" zoom_icon_color="#0066ac" hover_overlay_color="rgba(255,255,255,0.9)" background_layout="light" border_style="solid" auto="off" posts_number="22" /][et_pb_text _builder_version="3.0.64" background_layout="light" text_orientation="left" border_style="solid"]

Pasaban 10 minutos de las ocho cuando el telón del escenario del Auditorio del Revellín se levantaba, se apagaron las luces y los nervios afloraban quizá, más detrás de las tablas que frente a él donde se despertaba una nube de expectación por disfrutar de una tradición perdida hace años y que esta edición Festejos decidió recuperar: la del pregón.

Entre un fondo oscuro que dejaba poco a la imaginación, la voz del presentador Javier Barrientos, que repetía por segundo año consecutivo, resonaba entre el silencio para dar paso al pregonero “más joven de la historia del carnaval caballa”: Víctor Fernández.

El carnavalero hacía su entrada triunfal en el escenario vestido de catrín mexicano con una vestimenta propia de los charros y se postraba ante un altar ambientado en la misma temática.

Teñido por el negro y el azul con la escasa iluminación que desprendían las velas del altar, Fernández asumía su reto con desparpajo y melancolía. Un sentimiento del que estuvo bañado todo su discurso.

Fernández adelantaba a este medio que el suyo “sería diferente”, y lo fue. Sin atril, y sirviéndose de audiovisuales, el joven de 29 años hizo un recorrido por toda su vida en el carnaval, remontada al embarazo de su primogénita.

Sirviéndose de esas cintas de casetes y vídeos que “me ventilaba cada vez que llegaba a mi casa”, el carnavalero revivió algunos de los grandes momentos que ha dejado la fiesta de febrero y que “me marcaron”.

Aludiendo a la esencia del altar de difuntos, Fernández honró al carnaval caballa a través de sus recuerdos. Destacó la importancia que tiene para la ciudad, a su vez plasmada con sus iconos más representativos en esa gran escenografía.

El pregonero reivindicó una fiesta, que en varias ocasiones destacó que “se pierde”. Una fiesta que tiene que proyectarse al futuro y renovar, pero sin olvidar el pasado.

“Hay que mirar más atrás, acordarnos de todos ellos, los que levantaron estos cimientos y sin los que hoy no tendríamos carnaval”, apuntaba.

La crítica también estuvo servida, entre ironía y humor, Fernández también lanzó dardos. “En esta tierra todo se ha perdido”, comentaba rememorando algunos actos del carnaval de calle, que ya parecen de tiempos lejanos y tan sólo pueden revivirse a través de esos VHS como de los que se servía anoche el pregonero.

Fernández se despedía del escenario con su antigua chirigota, ‘Los rompedientes”, que se subieron a amenizar el final mientras los asistentes ya se removían entre sus asientos y desesperaban para que el concurso propiamente dicho arrancase.

Si bien Fernández quiso dotar a su pregón de un estilo innovador marcado por ese sentimiento que le genera esta fiesta, esa melancolía por tiempos pasados y la incertidumbre por el futuro, quizá pecó de juventud, pese a los años que lleva implicado.

No cabe duda de la pasión que depositó, pero casi una hora y media de pregón, hasta para los más veteranos hubiese resultado excesivo.

La apuesta de Festejos fue aplaudida por todos los carnavaleros, pero quizá debería estudiar para ediciones venideras establecer algunas pautas si no quieren que la asistencia se duerma antes de tiempo.

La salida del escenario de Fernández junto a su comparsa dio paso a una de las escenas más emotivas de la noche: la entrega de las Caballas de Oro, el gran reconocimiento del carnaval.

El primero en recibirla fue Javier Téllez, “el precursor de las agrupaciones callejeras”, decía Barrientos.

La viceconsejera de Festejos, Rocío Salcedo, era la encargada de imponerle la máxima del carnaval a este veterano que quiso estar acompañado de su mujer e hijas.

También fue Salcedo la que le entregaba el reconocimiento al segundo Caballa, Francisco Javier Pérez Menacho, ‘Javi Chaqueta’.

Pero sin duda el último de todos, el de Juan Antonio Artiel, fue el más emotivo de los tres. Su entrada en el escenario estuvo cargada de emotividad que se incrementó cuando, su compañero y amigo, Javier Téllez, solicitó entregarle el reconocimiento.

“Él es uno de los más grandes del carnaval y para mí es un orgullo imponerle la Caballa”, decía Téllez, antes de finalizar el acto con un emotivo abrazo, en el que no faltaron las lágrimas, y la posterior entrada de los hijos de Artiel.

La foto de familia cerraba la primera parte de la noche y anunciaba el inicio del gran concurso.

Fotos: Quino

[/et_pb_text][et_pb_text _builder_version="3.0.64" background_layout="light" text_orientation="left" border_style="solid"]

Entrevista de El Faro de Ceuta unos días antes del Pregón

Con tan solo 29 años Víctor Fernández se ha convertido en uno de los pregoneros más jóvenes del carnaval o, quizá, “en el más joven”, asegura el propio Fernández.

“Si no me equivoco es así, soy como una wikipedia del carnaval”, comenta. Una elección bastante comentada y que ha arrastrado alguna que otra crítica. Él las asume porque “no siempre llueve a gusto de todos” y señala que entiende que la elección de este año ha supuesto un cambio para muchos, aunque también comenta que “el pregón no es tarea fácil y otros antes que yo rechazaron la propuesta”.

Pese a su corta edad, la proposición por parte de Festejos no fue al azar, donde tenían conocimiento de este carnavalero que arrastra una larga y dilatada trayectoria. Quizá otros sumen media vida, pero 14 años entregados a esta fiesta no son pocos como para poder hacer frente a un pregón. Conocimiento y trayectoria no le faltan y, mucho menos, ganas, fuerza e ilusión.

Un cambio necesario

Fernández lo tiene claro, el carnaval necesita renovarse, hay que abrirse a nuevos aires y no encerrarse en el pasado. “Es necesario un cambio generacional, pero sin olvidar lo viejo. Es imposible que podamos introducir novedades, presentar chirigotas diferentes, si no conocemos a los que nos preceden, ellos son la base, de ellos aprendemos y, a partir de ahí, cada uno que adopte la línea que más le guste”, manifiesta.

Un cambio necesario pero que también considera complicado. En su opinión se ciernen tiempos difíciles sobre el carnaval, lamenta la ausencia de una cantera que suceda a los jóvenes de hoy y, para Fernández, es un mal presagio que condena su continuidad.

“Detrás de nosotros no hay nadie, es necesario fomentarlo y eso empieza por los centros escolares”, opina. Otro de los puntos negros que lo sacude, apunta Fernández, es la dificultad en estos días para hacer reír.

“Cada vez es más complicado, con el auge de internet y las redes sociales donde todo se parodia, a los carnavaleros nos supone cada año más quebraderos de cabeza porque todo está muy explotado, escuchado o visto”, explica.

Con 'Los pasotas de copas'

Él es de los que aguanta o, mejor dicho, de los que sigue profesando su amor por esta fiesta. Se subirá al escenario del COAC arropado por su chirigota, ‘Los pasotas de copas’, que le acompañará durante el pronunciamiento del pregón.

Adelanta que será “diferente”, con crítica pero “no mucha porque para eso ya están las agrupaciones”. Explica que el estilo es más parecido a los que se hacen en Cádiz. “Iré disfrazado de algo distinto, no me voy a servir de un atril y será prácticamente improvisado”.

Un pregón envuelto por el carnaval y al estilo de la muerte mexicana. “La idea me surgió viendo la película de Coco, porque la temática se puede relacionar de forma muy estrecha con la del carnaval”, expone.

Y hasta ahí se puede leer, el resto de interrogantes quedan reservados para el sábado cuando, después de cuatro meses inmerso en su preparación y tras un cambio de la idea inicial, Fernández abra los festejos del 2018 con un discurso a través del que pretende tocar los sentimientos, alentar para que se contribuya a que permanezca vivo y, sobre todo, “que guste y agrade”.

[/et_pb_text][/et_pb_column][/et_pb_row][/et_pb_section]

Entradas recientes

Ceuta, sede de la Sectorial de menores en 2025

La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha anunciado que la próxima Conferencia Sectorial…

23/12/2024

Esto es lo que Papá Noel nunca regalaría a los más pequeños de la casa

En plena temporada navideña, mientras los niños de Ceuta se preparan para recibir sus esperados…

23/12/2024

El PSOE lamenta que el PP ceda a presiones de Vox con los menores

Los socialistas resaltan que, de nuevo, el Gobierno progresista cumple su palabra y respalda a…

23/12/2024

La familia de un joven llevará al juzgado al Imserso por una valoración

La Asociación de Consumidores y Usuarios Halal de Ceuta, Acohace, ha remitido un escrito a…

23/12/2024

El marisco, producto estrella de la Nochebuena

Se acerca la cena de Nochebuena. Ese día en el que las familias de Ceuta…

23/12/2024

Licitación de Muface: hasta el 15 de enero para presentar ofertas

Las aseguradoras tendrán hasta el 15 de enero de 2025 para presentar ofertas para proporcionar…

23/12/2024