El porteo se inicia 24 horas antes sin avisar

• Quejas por el veto a artículos de ferretería en ‘Tarajal II’ y los coches colapsan la red viaria cargando alimentación por la Pascua del Cordero.

El porteo a pie y en coche se ha reanudado este miércoles por sorpresa, 24 horas antes de lo anunciado por la Delegación del Gobierno en un comunicado del 8 de agosto. Una reactivación del comercio transfronterizo sin previo aviso que cogió desprevenida a toda la ciudad con la excepción de las autoridades. La reapertura de la frontera y del ‘Tarajal II’ a las mercancías, programada para hoy jueves, se adelantó un día porque así lo decidieron “a última hora” la Delegación del Gobierno y las autoridades marroquíes, según informaron fuentes de la institución de la plaza de los Reyes.

Ambulancia atrapada

Después de una semana de veto al paso de mercancías por la frontera del Tarajal debido a la presión migratoria, las colas de los coches-patera regresaron ayer y trajeron consigo el colapso del que se ha librado la red viaria local en los últimos días. Los servicios públicos quedaron atrapados en los atascos, como fue el caso de autobuses y taxis. Pero las retenciones bloquearon también a ambulancias. Sin posibilidad de avanzar hasta el lugar de la incidencia, los pacientes tuvieron que esperar la llegada del vehículo sanitario que estuvo retenido por la acumulación de coches en el acceso a los polígonos. Una de las afectadas fue una porteadora que había sufrido daños en una pierna.

Las filas abarrotaron las carretera nacional, la subida al Príncipe Felipe, al Hospital Universitario y tal fue su longitud que alcanzaron la barriada de Miramar. Esta flota de vehículos dedicados al traslado de mercancías de Ceuta a Marruecos se internó dentro de los polígonos para abastecerse en las naves. La proximidad de la Pascua del Cordero hace que los coches-patera estén cargando sobre todo alimentación con el mercado marroquí como destino final. Almendra, especias, pasas y ciruelas, entre otros productos, que el mercado vecino demanda en estas fechas previas a la fiesta musulmana.

Por su parte, el paso de mercancías a pie, ‘Tarajal II’, retomó su actividad con las porteadores cuyo turno les tocó ayer dentro de la organización por género acordada entre ambos estados soberanos. Las filas humanas contaron con la supervisión del servicio de vigilancia de Eulen por segundo día desde que la empresa se hizo con el servicio hasta ahora en manos de Prosegur. El operativo que garantiza la seguridad en el exterior de los polígonos e interviene dentro en caso de que resulte necesario contó como es habitual con la UIP de la Policía Nacional y agentes de la Policía Local que incluyeron a efectivos de la UIR.

Los bultos que los comerciantes califican de “fraudulentos” coparon la salida de productos hacia Marruecos y surgieron quejas por parte de los empresarios ya que los paquetes con artículos de ferretería estuvieron vetados durante la mañana de ayer. Servicios Tributarios aseguró la semana pasada que las administraciones de ambos países habían acordado que el porteador estaría autorizado a portar un fardo de 60x40x40 centímetros y un paquete de mano “del tamaño de una caja de leche” para responder a las demandas de los comerciantes que rechazan el negocio del bulto de las consignas presuntamente irregulares. Sin embargo, ayer pudieron verse mujeres con bultos adosados a la espalda pero con las manos libres.

1.351 mujeres con ticket

Mediante el sistema de tickets que habilita a cada porteadora a cruzar un fardo al país vecino por el ‘Tarajal II’, la Delegación del Gobierno contabilizó a 1.351 mujeres que ayer recorrieron el circuito que conduce hasta el túnel de mercancías entre ambos países. La valoración que hizo este organismo oficial fue que el comercio transfronterizo se restablecía con “más o menos normalidad” en previsión de la acumulación de coches-patera que se vislumbraba para la tarde.

Los primeros signos de que el porteo se reanudaría antes de la mañana de este jueves pudieron verse en el otro lado de la frontera. Una multitud de porteadoras esperaban ya desde la noche del martes en la acera de la entrada principal a la Aduana marroquí, donde con toda probabilidad durmieron. El porteo motorizado registró los mismos movimientos anteayer, cuando los coches-patera ya se situaban en sus marcas expectantes ante una apertura de la frontera a las mercancías que finalmente se produjo.