Agentes de la
Policía Nacional de la Jefatura Superior de Policía de Ceuta intervinieron para salvar la vida de un joven de 21 años que se encontraba en la azotea de su
vivienda en un estado de gran alteración. Los agentes, pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía, habían sido comisionados por la Sala CIMACC-091 para que se personasen en un domicilio ya que un hombre se encontraba en su azotea. Debido a la importancia de los hechos, los actuantes se dirigieron con rapidez al lugar observando una aglomeración de personas que desde la vía pública gritaban a una persona que se encontraba en el borde de la misma. Ante la gravedad, los policías informaron a la Sala CIMACC 091 para solicitar la presencia de un servicio sanitario, controlando así de manera adecuada la situación. Acto seguido accedieron al domicilio con la intención de aproximarse a él y calmarlo, percatándose de que la puerta de acceso a la azotea estaba cerrada teniendo que acceder a la misma a través de una ventana situada en una habitación aledaña. Dada la estrechez del espacio, los agentes rápidamente se despojaron de sus enseres profesionales debido a que el varón se encontraba en un gran estado de nerviosismo, evitando así que pudiera producirse un mal mayor. Uno de los agentes se arrojó hacia el joven, logrando aprehenderlo y retirarlo del borde de la cornisa, auxiliado por otro policía. El joven fue trasladado al
Hospital Universitario. La Policía Nacional ha destacado que en su labor diaria, además de la prevención y persecución del delito, también desarrolla una labor humanitaria. En este caso la rápida actuación y, sobre todo,
la coordinación de la que hicieron gala fue determinante para evitar un mal mayor, sobre todo porque de no ser por la intervención tan adecuada podría haber sucedido un hecho de gravedad. En estos casos hay que trabajar de manera coordinada.