Agentes de la Policía Nacional de Ceuta llevan a cabo una investigación después de que en la mañana de este martes se produjera un desembarco a la altura del Club Caballa, a plena luz del día. Se procedió a la detención de una persona, el que se presume que era el que dirigía la embarcación en la que viajaban cinco inmigrantes, según narraron a este periódico testigos de los hechos. La llegada de la embarcación se produjo frente a la entrada al club, en la parte de las escaleras que conducen al Foso. Al detectarse la presencia de los inmigrantes intervinieron integrantes del CNP y se personaron también patrullas de la Policía Local, por lo se generó bastante revuelo ya que era un momento de elevado tráfico en el lugar.
Finalmente fue la Policía Nacional la que asumió el servicio que conducirá a la investigación sobre estos hechos, produciéndose la detención y traslado a Jefatura Superior del que se sospecha era el piloto que condujo a los inmigrantes hasta el lugar. La Policía Local, aunque hizo acto de presencia, no ha llegado a intervenir asumiendo todo el CNP.
El suceso se produjo en el momento en que todas las fuerzas de seguridad estaban participando en el dispositivo de seguridad enmarcado en el final de la Feria, al objeto precisamente de evitar la salida de inmigrantes a la Península. Precisamente mientras unos intentaban escapar al otro lado, otros llegaban hasta Ceuta, siendo protagonistas del mismo fenómeno de la inmigración que se asienta y cobra fuerza en la frontera sur de Europa.
El método del pase en moto de agua
En las últimas semanas, el fenómeno que está tomando fuerza en las costas ceutíes es el del pase de inmigrantes en motos de agua. Sin ir más lejos, este mismo martes la Guardia Civil detuvo a dos pilotos de este tipo de embarcaciones por colar a un grupo de argelinos a nuestra ciudad.
No obstante, se siguen intentando todas las vías posibles para llegar a Ceuta o cruzar a la Península: como polizones en los barcos comerciales, aprovechando la Operación Feriante, o incluso utilizando embarcaciones precarias como toys.
Seguro que eran menores o argelinos. No falla.
A mantenerlooooos , señores., que ésto es El Paraíso del Delincuente y atamos a los perros con longanizas.
A ver si aprendemos de Gibraltar.