Había grupos dispersos esperando la llegada del SEIS. El incendio ha sido provocado con acelerante en un foco de chatarra ya denunciado
Mientras los gritos de “hijos de puta” o “cabrones” se escuchaban a lo lejos, la
Policía Nacional blindaba todo el entorno de Arcos Quebrados y Príncipe para evitar nuevos apedreamientos a Bomberos. Distintos grupos de individuos estaban ya dispersos por diferentes puntos con el único objetivo de atacar, de nuevo, a los componentes del SEIS. Se han topado con distintas unidades que han complicado una acción que hace daño a todos, pero, sobre todo, a los propios vecinos. Con la escolta policial oportuna, blindados y protegidos, los Bomberos han entrado en el foco del incendio provocado esta tarde noche sobre la acumulación de chatarra que se arroja de manera deliberada en Arcos Quebrados. Una explanada denunciada en cuantiosas ocasiones, limpiada, pero que, de nuevo, sirve de almacén de restos de chatarra y piezas varias. Para provocar este fuego, que ha generado una columna de humo que se divisaba desde la carretera, se ha empleado acelerante. Por eso la generación de llamas ha sido mayor. Quien ha hecho esto no solo lo ha realizado de forma deliberada sino que ha invertido su tiempo en lograrlo. Los Bomberos, hartos de sufrir apedreamientos, no han entrado en el barrio hasta disponer de escolta policial. De hecho grupos de sujetos encapuchados estaban preparados para otro ataque. En la madrugada del domingo al lunes
los Bomberos sufrieron una nueva emboscada junto al Polifuncional del Príncipe. De media por semana se están produciendo en estos últimos meses varias agresiones con quemas intencionadas o lanzamiento de piedras, motivo por el que los Bomberos se concentrarán este martes en el Parque como primera medida de protesta “ante la inacción de quien debe protegernos”.