La
Policía Local detuvo el pasado martes, día 16, al responsable de una tienda de comestibles situada en las inmediaciones de un instituto céntrico de la ciudad. ¿El motivo? Un delito contra la salud pública, ya que le fue intervenido en el local que regentaba cerca de un kilogramo de
hachís, dispuesto en posturas para su venta.
Los agentes procedieron a identificar a unos jóvenes que están consumiendo presumiblemente sustancias estupefacientes. Al acercarse a ellos, advirtieron un fuerte olor a hachís que procedía del citado establecimiento. El titular de la tienda se encontraba fumando un porro y por su actitud nerviosa y poco colaboradora, fue cacheado por los agentes de la Local, encontrándole una postura de hachís. Pero había más.
Debajo del mostrador localizaron una caja de golosinas que tenía otras 15 posturas, y en un almacén contiguo sin puerta, otra caja con 16 posturas más y 7 ‘tabletas’ de hachís. En total, según la nota de prensa de la Jefatura de Policía Local, se decomisó 800 gramos de hachís, se detuvo al individuo responsable de la tienda por un delito contra la salud pública, y se desmantelo así “un punto importante de venta y menudeo de droga junto a un centro educativo como el I.E.S. Puertas del Campo”.