La titular del
Juzgado de lo Penal número 1 de Ceuta dejó visto para sentencia un juicio por un delito contra los ciudadanos extranjeros. El acusado, F.S. se enfrenta a 12 meses de prisión, pena que solicitó el Ministerio Fiscal tras escuchar la versión de los testigos. La Defensa, por su parte, pidió la libre absolución de su representado y, de ser condenado, que se le aplicara una atenuante de dilaciones indebidas. Los hechos por los que se celebró el juicio ocurrieron el 13 de agosto de 2020. Sobre las 18:00 horas, el acusado iba conduciendo una
moto de agua con un acompañante por las inmediaciones de Punta Almina. Los agentes de la Guardia Civil que testificaron indicaron que recibieron un aviso del COS de que habían accedido desde Marruecos e iban rumbo a la Península. Los agentes emprendieron ruta hacia ellos y, según señalaron, el acusado quiso darse a la fuga pero debido al estado del mar “en un giro cayeron al agua”. Al ir
sin papeles, los agentes los condujeron hasta el puerto deportivo y ahí comprobaron que al acusado le constaba una requisitoria y que el acompañante tenía una orden de prohibición de entrada al territorio español.
Divertimento desde Marina Smir
El acusado, por su parte, ofreció una versión muy distinta. Señaló que se encontraba en Marina Smir compartiendo un día de playa con unos amigos. Que ahí fue donde conoció al acompañante y que le dijo que tenía familia en Barcelona. Que los dos se montaron en moto de agua para pasar un rato de divertimento y no se dieron cuenta de que se habían introducido a Ceuta hasta que apareció la patrullera de la Guardia Civil. Asimismo indicó que no se dieron a la fuga y que hicieron caso en todo momento a las órdenes de los agentes. Además quiso dejar claro en varias ocasiones que él no era conocedor que al copiloto le pesaba una orden de prohibición de entrada, ya que le manifestó que vivía en Barcelona. Por último, el copiloto testificó en la misma línea del acusado y señaló que no comunicó “nada” al acusado de que tenía una orden de prohibición.