Ceuta está preparada para que en menos de un mes dé inicio la Operación paso del Estrecho 2018. Año con año la ciudad se prepara para este flujo de ciudadanos marroquíes que durante todo el año viven en la península o en otros países de Europa y aprovechan los meses de verano para poder visitar a sus familiares al otro lado del Estrecho.
No obstante, Ceuta ya no resulta atractiva para el paso de estos turistas que años atrás sí contaban con nuestra ciudad como paso indiscutible hacia el Norte de África.
No es algo nuevo, sino que viene pasando desde los años de la crisis, pero que no termina de recuperar el auge que se vivía en la etapa que discurrió entre el 2001 y 2006, cuando más de 400.000 personas atravesaban la ciudad de camino a su destino. Son muchos los motivos a los que se achaca esta situación y la brusca caída de pasajeros. La crisis tuvo mucho que ver en este proceso, aunque fue la aparición de Tánger-Med lo que facilitó a muchos la llegada a este destino sin necesidad de cruzar por Ceuta.
El número de pasajeros crece año con año. De los 600.000 que embarcaban desde Algeciras hace 23 años, en la operación pasada se contabilizaron 800.000, aunque aún no se han recuperado las cifras de 2006 y 2007, su pico histórico, donde casi un millón de pasajeros cruzó hacia el Norte de África.
Sin embargo las cifras de Ceuta se estancan. Además de la merma provocada por la crisis y la aparición de Tánger-Med, no hay que obviar el importante problema fronterizo que sufre nuestra ciudad y las consecuencias que tiene en esta importante operación. Ceuta ya no es atractiva para el turismo de paso y eso es alarmante. Otra consecuencia más del caos de la frontera.