Patio Hachuel: “Antro de podredumbre”

En la Consejería de Medio Ambiente andan escasos de sentido común. Esta es la única conclusión a la que pueden llegar los vecinos de Paseo Colón vista la permisividad de las autoridades ante la degradación del Patio Hachuel. Basura acumulada, excrementos humanos, ratas, vehículos en aparente estado de abandono donde pernoctan los sintecho, escondite de botines...

Un foco de insalubridad y delincuencia en el corazón del centro de Ceuta al que los afectados por tal abandono denominan el “antro de podredumbre”.

Francisco Montilla, portavoz de los residentes en la zona, exige al consejero, Fernando Ramos, a cumplir con sus cometidos, entre otros, conservar estos espacios en condiciones.

Él mismo telefoneó a Trace –como adjudicataria del servicio de limpieza pública y recogida de basura– para solicitar una intervención de choque en la zona. Sin embargo, la respuesta fue que se trata de una propiedad privada y sus operarios no pueden actuar allí.

Por tanto, si la Ciudad Autónoma cuenta con la identidad del dueño, los vecinos consideran que la administración puede tapiar la entrada a Patio Hachuel –y sanear llegado el caso– de manera subsidiaria y pasar luego los costes al propietario.

Otra alternativa que sugirió el propio Montilla, indignado con el abandono de este descampado, consiste en la instalación de una puerta en el acceso cuya llave obrase en poder de la persona que corresponda en caso de que necesitasen abrir por alguna razón.

Trace se niega a limpiar porque tiene propietario y, por eso, instan a tapiar el llano o poner una puerta

Los perjudicados realizan esta denuncia de forma pública a través de este periódico porque no tienen más armas a su alcance que el “diálogo”, aunque Montilla recordó que ya dieron entrada por Registro a varios escritos sobre un asunto “que se pasan por el forro”.

La ocupación de Patio Hachuel como depósito de vehículos se descongestionó hace ya algún tiempo, sin embargo, el llano ha adquirido usos más alarmantes como es el de escondrijo tanto de delincuentes como de los botines de sus robos. “Por la noche están con sus trapicheos. Les hemos visto hasta salir con paquetes”, indicaron los residentes en los alrededores que han llamado en infinidad de veces al 112.

Por otra parte, los desaprensivos arrojan basura justo a la entrada de Patio Hachuel; los coches fuera de uso son ahora el dormitorio de indigentes; “no hay más ratas porque hay una colonia de gatos” y cualquiera con una ‘urgencia’ “para allí a cagar y mear”. Los vecinos se declaran “cansados” de promesas incumplidas y exigen una solución a esta “guarrería” consentida.