La cara más dramática de la tragedia ha arrojado un halo de esperanza para otros: algunos de los animales de la Protectora de Animales que, tras su evacuación el pasado sábado, ante el riesgo de que el fuego llegara a las dependencias de Postigo, fueron adoptados o, actualmente, se encuentran en casas de acogida.
Chester, Agatha, Milka, Nanaki o Dana. Son algunos de los afortunados. La muerte de numerosas especies animales en García Aldave ha marcado el inicio de una nueva vida para otros. “Después del trágico fin de semana que hemos tenido, parece que ha salido algo bueno porque el sábado muchas personas se llevaron a nuestros animales en acogida en previsión de que tuviéramos que desalojar”, explica la presidenta de la Protectora de Animales, Montserrat Fernández.
Finalmente, la posibilidad de que un cambio en la dirección del viento permitiera a las llamas alcanzar las dependencias de la asociación, llevó a la evacuación de 70 perros y 40 gatos que fueron trasladados hasta el parque de perros, donde se acercó un gran número de voluntarios para atender a los animales en esos instantes de tensión y nerviosismo. Pronto, el recinto se llenó de cientos de litros de agua y kilos de comida donados por numerosos animalistas.
Otros 200 felinos (aquejados de alguna enfermedad) sí fueron preparados para la evacuación y subidos al camión de la Protectora, aunque, finalmente, el control del incendio, no hizo necesario su traslado.
Aunque la gran mayoría de perros y gatos regresaron la misma noche del sábado a la Protectora, otros muchos fueron acogidos por voluntarios que aportaban así su granito de arena a la desgracia medioambiental sufrida por la ciudad el fin de semana. Otros encontraron una adopción definitiva: tres perros y un gato que ya conocen lo que es el calor de un hogar. “Hemos acercado nuestros animales a la ciudadanía, han conocido las maravillas que tenemos arriba y se han quedado impactados de lo agradecidos que son. Creo que a partir de ahora más personas subirán a pasearlos, adoptarlos o acogerlos”, confía Fernández.
La respuesta ciudadana ante el riesgo de que el fuego pudiera alcanzar la Protectora es una de las cosas que quedará grabada en la memoria de Fernández. “Ha sido maravilloso y estamos muy agradecidos porque todos querían ayudar. Fueron momentos de mucho nerviosismo pero la gente se volcó subiendo en sus coches particulares para bajar a los animales”.
Casi 300 animales fueron evacuados de las dependencias de la Protectora y 15 ya están en un hogar, pero los que no han tenido tanta suerte de encontrar una familia continuaron regresando ayer lunes esperando que alguien pueda ver en ellos al amigo fiel y compañero de juegos perfecto para los niños.
Nanaki ha conocido lo que significa vivir en un hogar donde la quieren
Desiré Cubiella ya tiene animales pero no dudó en ayudar a uno de los pequeños que necesitaba ser evacuado. Así conoció a Nanaki, una gata de apenas mes y medio a la que le ha ofrecido un hogar de acogida. “Salí de trabajar y me dijeron que estaban desalojando. Me fui directamente para allá y me dio tanta pena que me la traje”.
Sólo iban a ayudar en el parque de perros pero Agatha les robó el corazón
Su intención era acudir al parque de perros para ofrecer su ayuda, pero para Elena Martínez y su hija todo iba a cambiar cuando la pequeña pidió hacerse una foto con una cría de poco más de un mes. Se ganó sus corazones y “Agatha, que es su nombre, si al final es hembra”, comenta risueña la niña, ya forma parte de su familia.
El encuentro entre Dana y su casa de acogida fue “un flechazo”
“Estábamos en la playa y nos avisaron de que habían evacuado a los perros y al verla fue un flechazo, me enamoré de ella”. Así fue el primer encuentro entre Vicente Sabido y Dana, una perra de cuatro años que, aunque de momento está en acogida, parece que está a un paso de convertirse en parte de la familia. “Estoy encantado con ella”.