Opinión

La paradoja del Año Nuevo

En el Anuario de 2024 de este periódico he publicado un artículo titulado “Predicciones”. Entre otras cuestiones, hablaba de la bondad de nuestra situación económica, de la que se venía informado ampliamente en distintos medios. La OCDE había elevado de nuevo sus predicciones de crecimiento para España, situándolo en un 3% para 2024 y en un 2,3% para 2025, cifras muy por encima de lo calculado por el Gobierno y cuatro veces superiores a la media de la eurozona. Decíamos que el factor que tiraba del carro de la economía española, según este organismo, era la demanda interna.

También daba unas predicciones que surgían de un curso sobre series estadísticas que se impartió en el Instituto de Estudios Fiscales unos meses antes. En lo que a desempleo se refería, se confirmaba una tendencia descendente para los meses de verano, que llegaría a los 2,56 millones en agosto, para subir hasta los 2,65 millones en noviembre de 2024. La realidad ha sido de 2,58 millones, cifra que no se conocía desde septiembre de 2008. Y respecto a la afiliación total a la Seguridad Social, se preveía un incremento sostenido con cifras de 21,41 millones en julio y 21,25 millones en septiembre. En noviembre de 2024, el resultado final ha sido de 21,30 millones de afiliados.

Pues bien, con los datos reales que acabamos de conocer del mes de diciembre de 2024, no solo se confirman estas predicciones que hacíamos, sino que en la realidad se mejoran. El sindicato Comisiones Obreras lo resalta en su Informe de Coyuntura Laboral de este mes, dando una serie de claves importantes. La primera es que el empleo crece en diciembre, pero que en términos interanuales el aumento es de 501.951 afiliaciones, alcanzándose un nuevo máximo de 21.338.962 afiliaciones. Pero también mejora la calidad del empleo, pues suben los contratos indefinidos y bajan los temporales. Y el paro baja también en ese mes, representando en términos interanuales una bajada de 146.738 desempleados.

Pese a lo anterior, la percepción de la gente sigue siendo que la situación económica no está bien. Que su sueldo no les permite llegar a final de mes y que la vivienda sigue siendo inasequible para multitud de jóvenes que quieren independizarse. ¿A qué se puede deber esta paradoja? En algunos diarios, como El País, se indica que, pese al robusto crecimiento económico y al panorama favorable, problemas como la vivienda, la productividad, la guerra arancelaria y la inestabilidad política podrían frenar el progreso del país. Quizás sean estos indicadores los que percibe la población.

Un buen amigo, compañero de la universidad, psicólogo e investigador, me sugiere la lectura de un libro titulado “Síndrome 1933”, de Siegmund Ginzberz, que nos traslada a los meses previos al desmoronamiento de la República de Weimar y analiza de forma pormenorizada cómo los nazis pudieron conquistar el poder gracias a la colaboración de los supuestos garantes de la democracia: las instituciones del Estado, la clase política, la prensa y la sociedad civil.

Ya leí una referencia a dicho libro en algún artículo periodístico. Me llamó la atención algo, que se repite en la información sobre el mismo de la editorial que lo publica: “Una campaña electoral permanente, acuerdos de coalición insólitos, partidos que no son ni de izquierdas ni de derechas sino «del pueblo», voces que se alzan para acallar a la prensa, polarización y discursos de odio, políticos acusados de traición y un Gobierno demagógico e irresponsable. Estos son algunos de los síntomas de deterioro democrático que allanaron el terreno para que Hitler, un charlatán autoritario al que pocos se tomaban en serio, ganara las elecciones alemanas en 1933. Síntomas que, en un inquietante déjà vu, vuelven a aflorar y amenazan con acercarnos peligrosamente a un pasado que creíamos haber superado.”.

Y también me ha llamado poderosamente la atención, lo que el Papa Francisco dice sobre este libro: “Las ideologías sectarizan, deconstruyen la patria, no construyen. Hay que aprender eso de la historia. En este libro Ginzberg, con mucha delicadeza, hace un parangón con lo que está ocurriendo en Europa. Vale la pena leerlo”.

El multimillonario aliado de Trump, Elon Musk, publicó días atrás su apoyo a la ultraderecha alemana de la AfD, en plena batalla electoral. Y hoy mismo, se permite acusar el primer ministro del Reino Unido de tapar delitos sexuales contra menores, por algo que ocurrió hace ya una década. Pronto intervendrá en la política española con alguna otra ocurrencia. Su interés claro es debilitar a Europa, para allanar el camino de la llegada a la Casa Blanca de Trump y, de paso, fomentar a los grupos de ultraderecha.

Evidentemente, entramos en tiempos difíciles en los que la mentira y los bulos campan a sus anchas y los grupos de ultraderecha, enemigos de los emigrantes, de las mujeres y de los homosexuales, se ven favorecidos por poderosos personajes de este tipo. No queda otra que rearmarse moralmente e intentar llegar al pueblo sencillo, para evitar que se deje manipular por estos vendedores de falsas ilusiones.

Entradas recientes

Las obras entre Los Rosales y Poblado Regulares finalizarán en abril

Las obras entre Poblado Regulares y Los Rosales, en Ceuta, están avanzando de manera considerable…

05/01/2025

Intervención de la Guardia Civil ante pescadores marroquíes

La incursión de pateras de pesca marroquíes en aguas de Ceuta para ejercer prácticas ilegales…

05/01/2025

La otra Cabalgata, la otra Navidad

No voy a entrar en la polémica del cambio de día de celebración de la…

05/01/2025

Medidas contra el narcotráfico

El parcheo de medidas para combatir el narcotráfico pone en evidencia el chapuceo para acabar…

05/01/2025

La obra clave entre Los Rosales y Poblado Regulares

En la recta final. Esta es la buena noticia con la que inician los vecinos…

05/01/2025