Todo apunta a que la vía de escape ha sido el embarque en alguno de los vehículos que a diario unen Ceuta con la península, de igual forma que lo hicieron algunos de los sirios que se encontraban también en el CETI o en el centro de menores Mediterráneo. Es la vía elegida para las escapadas y explotada sobre manera por el colectivo de argelinos. De hecho son más de doscientas las registradas durante el pasado año, lo que no hace sino confirmar que este tipo de pases se produce siguiendo un efecto llamada claro. Al igual que los adultos del CETI, también se registran cuantiosas marchas de menores de las que no se tiene siquiera registro porque hay grupos que no están siquiera controlados por la Ciudad Autónoma.
Embarques con documentación falsa, otro pase
Aunque la amplia mayoría de inmigrantes está intentando escaparse en los camiones, ocultándose en sus bajos o dentro de las cargas, también existe otra vía, cuando menos buscada por los sin papeles de mayor poder adquisitivo: la compra de pasaportes falsos por 6.000 euros. De esta forma entraron en Ceuta algunos de los inmigrantes que ahora están en el CETI y de la misma manera pretenden pasar a la península, buscando burlar el control documental que la Policía Nacional dispone en el puerto. Se tiene constancia de los contactos de las organizaciones mafiosas dedicadas a este tráfico de documentos con compatriotas ya asentados en el CETI. El uso de documento falsificado es más extendido entre la población fácilmente identificable con la magrebí. El documento no tiene por qué ser falso en sí, sino que se le ha practicado alguna alteración para confundir la fotografía con la de la persona que lo va a portar.