Un total de 304 candidatos se presentaron ayer en el IES Siete Colinas a la primera prueba del proceso para cubrir 28 plazas de Maestros de 4 especialidades en Ceuta
Sin ‘efecto llamada’ y con una ratio de alrededor de diez opositores por plazas arrancó ayer a primera hora de la mañana en el IES Siete Colinas el proceso selectivo abierto por el Ministerio de Educación para cubrir 28 plazas del Cuerpo de Maestros en Ceuta de las especialidades de Pedagogía Terapéutica, Audición y Lenguaje, Música e Inglés.
A la presentación ante los Tribunales acudió un total de 304 candidatos, aproximadamente tres de cada cuatro admitidos a presentarse a las pruebas. Alrededor de otro 5% se limitó a firmar como paso protocolario inexcusable para seguir en las listas de interinos o entrar en ellas.
En la especialidad de Pedagogía Terapéutica concurrieron a la primera prueba 137 candidatos; a la de Audición y Lenguaje, 56; 71 a la de Inglés y 40 a la de Música, según los datos recopilados por FeSP-UGT.
Por las once plazas de Inglés tenían la posibilidad de pelear un total de 95 personas, 93 por las diez de ingreso libre y dos por la reservada para personas con discapacidad. De Pedagogía Terapéutica se han convocado 9 plazas (8 de ingreso libre y una de discapacidad) que se podían disputar 156 y 9 opositores, según la vía de acceso. Finalmente, a las cuatro de Audición y Lenguaje habían sido admitidos 82 aspirantes y a las cuatro de Música, 56.
Los opositores se enfrentaron ayer a la parte más ‘dura’ de las oposiciones, aquella de la que acostumbra a salir descabalgado un mayor porcentaje de candidatos: la “demostración de los conocimientos específicos de la especialidad docente”.
En la primera parte tuvieron que realizar un ejercicio práctico para demostrar contar “la formación científica y el dominio de las habilidades técnicas correspondientes” y en la segunda, “el desarrollo por escrito de un tema elegido por el aspirante de entre dos, extraídos al azar por el tribunal, de los correspondientes al temario de la especialidad”.
Los opositores de Música deberán volver a verse las caras con el Tribunal el próximo lunes para una prueba específica.
Para la superación de esta fase los aspirantes deberán alcanzar una puntuación total igual o superior a cinco puntos, el resultado de sumar las dos puntuaciones ponderadas obtenidas.
Quienes aprueben se enfrentarán, presumiblemente durante la primera semana de julio, según las fuentes consultadas, a la segunda parte de la oposición, dedicada a “comprobar la aptitud pedagógica del aspirante y su dominio de las técnicas necesarias para el ejercicio docente”.
Consistirá en la presentación de una programación didáctica y en la preparación y en la exposición oral de una unidad didáctica.
Después de que el elevado listón colocado por los Tribunales haya dejado plazas vacantes en procesos anteriores, los sindicatos esperan que en el de este año se puedan cubrir al menos las que se han publicado.