Gabriel García Márquez en su rol de periodista, nos trae la historia real del secuestro de Maruja Pachón Villamizar, ocurrido en Colombia en el año 1990, a manos de Pablo Escobar. relación del hecho con otros nueve secuestros realizados por la misma organización.
El libro transita por las emociones de los secuestrados, sus familias, la relación de los políticos con la corrupción y también las personalidades de los secuestradores, sus cambios de ánimo, el pasar de bestias a personas comunes que, algunas veces llegan a detestar el "trabajo" en el que realizan.
La historia es una especie de avanzadilla de lo que quiero contaros este sábado.
La próxima semana se debatirá en el Parlamento el cambio legislativo sobre los delitos de sedición y malversación.
Ambos serán reformados en el código penal con la mayoría parlamentaria del pacto de gobierno. (PSOE, Bildu, ERC y UNIDAS PODEMOS).
Hacer constar que las mayorías parlamentarias necesitan pactos de estabilidad para afrontar la legislatura.
Me preguntó el precio de esos pactos y qué pasaría si el gobierno de la nación convocara un referéndum para la consulta de cuestiones fundamentales que afectan al conjunto de la población. En los Estados Unidos los ciudadanos son citados a las urnas para pronunciarse sobre asuntos de importancia relevante.
El partido socialista en calidad de secuestrado" deberán pagar a sus " secuestradores' un precio que pondrá en peligro las arcas de la ética, del sentido común y de la justicia y lo veremos entre las cuerdas en un bochornoso espectáculo.
Los socios de gobierno proponen, con amenazas explícitas y tácitas una reducción por delitos de sedición y malversación.
¿ Qué sucede si cualquier comunidad, haciendo de su capa un sallo y sin contar con nadie decide motu propio declarar la independencia del resto del Estado? ¿ Qué lectura política harán otros países a cuyas instituciones pertenecemos? ¿ Se tiene derecho a romper el orden constitucional cuando a alguien le venga en gana? Al menos queda feo.
Un ejemplo que ilustre el tema El instituto Camoens cuenta con dos edificios, uno para alumnos de primero de ESO y otro para el resto. ¿ Cómo actuaría la Dirección del Centro, la dirección Provincial y el Ministerio de Educación si yo decido la independencia? ¿ Podría, argumentar en mi defensa que la inmensa mayoría del alumnado lo desea? ¿ Serían sancionados los ideólogos expedientados y perderían la condición de funcionarios?
No sé qué pasaría. Bien no pintaría el asunto.
Me pregunto si un ejecutivo está legitimado moralmente a pasar por el aro de los socios a cualquier precio.
No discuto el derecho de los pueblos a decidir, lo que no procede es que se salten las reglas del juego arguyendo sus derechos sin pensar en las obligaciones que de ello se derive.
Sócrates pensaba que las leyes son sagradas, aunque sean injustas pues son consensuadas y aceptadas. Lo que defendió es cambiarlas aceptando las normas previstas para el cambio.
Otro asunto es la malversación.
¿Es lo mismo malversar que lucrarse para el peculio propio? ¿ Y si disponemos del dinero para hacer lo que nos venga en gana sin pensar en las necesidades del sistema?
Nuestro emérito no robó para él, no se enriqueció. Sus hurtos eran para Corina. Él no quería nada.
Pongo un ejemplo: en el Camoens no hay aula de música; no pasa nada, todo el presupuesto del año va para el aula. La luz, el agua, el mantenimiento, los materiales los pagará Rita la cantaora. La Directora sería reñida con un tirón de orejas administrativo pero no sancionada con severidad esperada. Las partidas al carajo!
Maragall, el Alcalde de Barcelona, levantó la mano y dijo: " estamos hablando del 3 por ciento". Eran las comisiones a empresas adjudicatarias. En fin, no sigo.
Ya el robo a mano armada para aumentar el patrimonio se podrá convertir por arte de birlibirloque en extrañas empresas ubicadas en las islas Mambrú. Al menos podremos tararear " mambrú se fue a la guerra, que dolor que dolor que pena, mambrú se fue a la guerra no sé cuándo vendrá do re mi do re fa, no sé cuando vendrá" sería una letra para los próximos carnavales de Cádiz.
¿Cómo no vamos a ver al Dioni como héroe nacional?
Y así, secuestrada la izquierda, se vuelve fascista, traiciona a su Ideología y deja en pelotas a sus votantes.
Tal vez la reforma salga adelante y el presidente nos venda la bacalá pero el socialismo, la lucha obrera, todos los que murieron por la defensa de la justicia se quedarán ojipláticos y cariacontecidos.
Yo digo como Lola Flores : "Si me queréis, irse".