Nos toman por idiotas

O al menos esa es la sospecha que tengo a tenor de las noticias publicadas estos días. No sé qué pasa por la cabeza de los seres humanos que todos creemos ser inteligentes y además en una medida superior a los demás. Quizá la humildad y el reconocimiento de la limitación de nuestras capacidades personales, nos alejaría de meternos en embrollos, y sobre todo de provocar la irritación en los demás por tomarlos por tontos.
En este país, en el que la picaresca es un género literario, resulta que los esposos no saben nada de lo que hacen sus esposas y viceversa, aun estando casados en bienes gananciales. Sin embargo, habiéndolo consultado con varios amigos, tanto en mi hogar como en los de ellos, no se mueven más de 300 euros sin que se entere el cónyuge. Es más, en algunos casos, no se mueve ni un solo céntimo sin el visto bueno de los respectivos premios nobel de economía que cada uno tiene en nuestra sociedad matriarcal. No digo ya, si aparezco con un Jaguar en el garaje, una hípica en Toledo, una casa de 6 millones de euros en Pedralbes, o regalo un bolso de Louis Vuitton valorado en más de mil euros.
Asesinan a Marta del Castillo, los verdugos dan tres versiones diferentes de lo acontecido, y el resultado es que los carniceros andan por la calle paseando con chulería, gafas de sol y peinado “choni” incluido.
Un juez estrella, ya estrellado, le abre una causa a un cadáver mientras busca financiación desde su puesto de trabajo para cursillos en EEUU, y ahora pretende hacernos creer que es un mártir de la progresía, adalid de la justicia y la integridad, vislumbrando consistencia en la información publicada sobre los papeles de Bárcenas
¿Acaso sabe más que el resto de los ciudadanos? Porque hay que recordar que fue condenado por escuchas ilegales.
El gobierno de la Junta de Andalucía, que no es capaz de explicar dónde han ido a parar los 1.403 millones de los EREs, va ahora y pregunta por los 22 millones que tiene Bárcenas.
Por no hablar de la enorme cantidad de recortes encubiertos a los funcionarios, tiesos como mojamas,  mientras los altos cargos cobraron sus pluses de productividad en marzo del año pasado. Y el colmo de los colmos del señoriteo andaluz, es tener la sanidad más privatizada de toda España (el 71% de las residencias y el 54% de los hospitales) y sacar pecho contra Madrid por intentar hacer la misma barbaridad andaluza.
Tras el nuevo apagón total, uno más en la penosa lista de una Ceuta que pretenden hacer tercermundista, informan que es demasiado complejo para explicarnos las causas del mismo. Y la verdad, no es que quiera que me den una lección magistral sobre la Ley de Ohm, pero cuando 80.000 personas se quedan sin luz, durante horas, la explicación es bien sencilla, se llama negligencia.
Nos toman por idiotas. Aunque reconocerlo es el inicio para no serlo tanto.