“Nos pegaron sin motivo”

El primer topetazo se lo llevó M.M, un vecino de la zona que estaba preparando la cena cuando escuchó los gritos de alarma de su hermano pequeño por la ventana que decía que unos chavales se estaban peleando. Su mujer bajó corriendo “y yo detrás para buscarla y traerla a casa por si había jaleo”. Al bajar, asegura que un agente le cogió por el cuello con la porra y le paralizó. Muestra las señales en su cuello y dice que “acto seguido comenzaron a pegarme”. Explica que él ni pegó a los agentes ni lo intentó. “Forcejeé, eso sí, porque sentía que no podía respirar”. Aún no se lo cree. Tras la paliza que asegura le dieron, le dijeron que estaba en busca y captura y que se iba detenido. “Me lo podían haber dicho antes, pedirme la documentación e informarme. Les vino muy bien para justificar todo el abuso”. Acaba de salir del calabozo, donde pasó dos noches junto a su mujer que también muestra las magulladuras de su cuerpo. “Cuando bajé vi cómo estaban pegando a la señora”, explica J.V. en referencia a la madre de los chavales por los que comenzó el altercado. Dice que al darse la vuelta se dio cuenta de que estaban pegando a su marido “y fuí hacia ellos diciendo que por favor le dejaran, le dieron con la culata en la cabeza para atontarlo, no dejaban de golpearle”.
Entonces asegura que le dieron en las piernas con la porra a ella. “Me quedé sin habla. Le dije que me había pegado y que le iba a denunciar e intenté quitarle la porra, entonces me dio otra vez”. Dice que la “trincaron como a un perro y la metieron en el furgón”. Aún con señales en las muñecas que asegura son el resultado de cuando la cogieron “de malos modos”, explica que al llegar a comisaría no se podía creer lo que estaba pasando. A su marido, M.M., continuaron pegándole “por la cara. Entonces dije que quería ir al hospital porque ya no podía más y me dijeron que yo soy el culpable de haber herido a tres policías y que me iban a partir la cara”. Aún perplejo asegura que “hemos sido las cabezas de turco, que nada teníamos que ver con esta historia pero ahora les hemos venido muy bien”.
Quiere aclarar lo que se ha dicho de que “estaba en busca y captura” explicando que “ni soy un delincuente ni un asesino”. Se trataba de una multa de tráfico que no había pagado y que ayer, entre todos los vecinos de la barriada, colaboraron para reunir los 1.857,80 euros para que pudiera salir del calabozo tras abonar la sanción. Y así fue.
En esta entrevista con ‘El Faro’, aparece en escena la tercera detenida. La hermana de M.M. “Cuando me dijeron que estaba detenido, vine a comisaría a buscarle y mientras estaba en la puerta, llegó un furgón, un agente me pidió la documentación y me llevó detenida porque dijo que yo le había arañado cuando estaba en la barriada”. Ella no da crédito.

“Ni siquiera tengo uñas”
Dice que no sólo no estaba cuando sucedieron los hechos, sino que “ni siquiera tengo uñas tal y como expliqué posteriormente y que si hubiese sido así que me hubisen detenido en el lugar de los hechos”. Asegura que hay muchos testigos que saben que ella no estaba allí. Entonces los tres terminaron en el calabozo. Dicen que estuvieron “durante dos noches, sin poder dormir, casi sin comer, con mosquitos, cucarachas... y escuchando a algunos agentes como decían que “les habíamos agredido e íbamos a pagar por ello”.
También dicen que van a llegar hasta el final con lo que ha sucedido porque “queremos justicia, que no queden impunes, que no vayan avasallando a la gente, que somos personas, no perros y que nos ha pasado a nosotros que no tenemos dinero pero le puede pasar a gente con menos recursos e ir a la cárcel directamente por una mentira”. Agradecen a los vecinos el haber ayudado a pagar la multa y temen que ir a juicio les suponga un gasto al que no se pueden enfrentar “pero vamos a luchar porque queremos justicia: nos han pegado sin motivo, nos han detenido sin justificación y nos han humillado sin saber por qué y no podemos quedarnos quietos ante esto”.

Detalles de la historia

Concentración: Sin fecha clara
La Asociación Vecinal de Poblado de Regulares y Claudio Vázquez ha solicitado en Delegación el permiso correspondiente para llevar a cabo una concentración pacífica como protesta a la actuación llevada a cabo por los agentes. “La intención es hacerla el lunes pero aún estamos a la espera de la respuesta del delegado”, explicaba el presidente vecinal, Alí Hamido.
La evidencia:Cintas de viodeocámaras
Todos los vecinos insisten en que son la prueba evidente de lo que sucedió la pasada noche del miércoles. Solicitan que se entreguen en el juzgado para resolver el caso y determinar lo que a su juicio es evidente: “Algunos agentes abusaron de su autoridad”.
La "excusa":El que estaba en busca y captura habla
Dicen que ni siquiera tenían la citación de la multa y explican que les ha venido de sorpresa porque “pasábamos a Marruecos con total normalidad y si alguien está en busca y captura no creo que pueda”. Dicen que los agentes podrían haber informado “antes de pegarme” y aseguran que eso “les ha venido bien para justificarse”.

El juez llamará a algunos policías a declarar en calidad de imputados

Carmen Echarri/ ceuta
Los cuatro adultos detenidos tras la tangana ocurrida en Claudio Vázquez fueron puestos a disposición judicial en la mañana de ayer, quedando después en libertad. Aunque en principio se pretendía buscar una conformidad y llevar el asunto como unas diligencias urgentes finalmente se transformaron en diligencias previas, ya que los detenidos mostraron ante el juez del número 1 que instruye el caso, Andrés Carreño, su intención de denunciar a algunos de los policías actuantes proponiendo además testigos.
Así las cosas comienza ahora una tramitación que durará su tiempo hasta que se aclare, judicialmente, lo ocurrido en la noche del miércoles al jueves que provocó varias detenciones, otras tantas denuncias y heridos además de una concentración vecinal a las mismas puertas de la comisaría de Los Rosales.
Sobre la mesa hay versiones enfrentadas frontalmente, ya que la Policía Nacional acusa a los detenidos de atentado, alteración del orden público y lesiones, mientras que éstos, además de negarlo, son los que acusan a los agentes de haberles golpeado. Escuchadas las manifestaciones de los detenidos en la mañana de ayer, el juez ha llamado a declarar a algunos agentes en calidad de imputados para que respondan de las acusaciones que contra ellos han hecho estas personas. Los agentes deberán ir acompañados de abogado y su testifical todavía no ha sido señalada, indicaron fuentes judiciales.
Básicamente los detenidos que declararon ayer negaron ante el juez que hubieran iniciado una tangana contra la Policía y todos hicieron mención al origen de la trifulca, señalando que se había producido porque un agente había golpeado a la madre de un menor (que fue también una de las detenidas) cuando se interponía para evitar que le golpearan al chico. Varios de los detenidos han identificado a los agentes que presuntamente se habrían extralimitado, según sus declaraciones. Una de las detenidas manifestó que en su caso le habían arrestado cuando, al saber que habían detenido a su hermano, acudió a la comisaría a preguntar por él. En el caso de la madre se le detuvo en el Hospital. Hay vecinos que recibieron algún tipo de lesión que también han mostrado su intención de acudir al juzgado a denunciar.
El médico forense comprobó en el día de ayer las lesiones en forma de moratones que presentaban y uno de los detenidos hizo mención expresa a las cámaras de la comisaría de Los Rosales, solicitando que sean requeridas para que se pueda visionar de forma objetivo y clara lo que ocurrió.
Los policías nacionales que intervinieron para controlar este altercado siguen manteniendo la misma postura hecha pública por la Jefatura en nota de prensa oficial.

Vecinos: “En el barrio nunca ha pasado esto”

Las cámaras. Los vecinos piden una y otra vez que se visione lo grabado aquella noche y señalan que en su barriada, salvo hechos puntuales, nunca se han producido tanganas de este tipo. “En el barrio se está trabajando mucho por la integración, porque los jóvenes no estén metidos en problemas, el presidente de los vecinos se los lleva de aquí para allá. Lo que pasó esa noche fue una niñatada de chavales y no sabemos cómo terminó así. Eso se tiene que aclarar y lo mejor es que se vean las cámaras”, denuncian. No niegan que hubiera apedreamientos, “pero esas piedras fueron contra los policías y contra los propios vecinos. En eso no participa la gente que vivimos aquí. En lo que ha pasado no hay ninguna historia rara, ni ajustes de cuentas ni nada que luego cuentan. Las familias de los detenidos son familias buenas, del barrio, que no se meten en problemas, por eso hemos salido todos a la calle porque queremos que esto se aclare para que no pase más”.