Javier González Juárez se crió en la tienda de su padre: ‘Librería General’. Un comercio con 60 años de trayectoria, situado en la avenida de África. Pero la historia de esta papelería de Ceuta se remonta aún más atrás; el abuelo de Javier González abrió su primera librería en 1945, en la calle Real, frente a la antigua Caja Nacional. La segunda llegó en 1961, cuando vio una oportunidad de negocio en la barriada Puertas del Campo. Por aquel entonces, relata González, la zona tan solo contaba con el Instituto Siete Colinas, una tienda de fotos y un supermercado.
“Siempre ha sido un negocio familiar. Cuando mi abuelo lo llevaba pasaron todos mis tíos por aquí”, explica el ceutí de 43 años. Cuando falleció el fundador de las tiendas, en 1999, uno de los tíos de González Juárez se quedó la de la calle Real y su padre, Juan José González Serrano, la de la avenida de África. “Siempre hemos estado aquí mi padre, mi madre y yo; mi madre se jubiló ya y seguimos nosotros”, añade Javier González, que empezó a trabajar con ellos en el año 2000.
Con los centros educativos cercanos, el lugar es frecuentado por muchos estudiantes, pero también por familias, ya que cuenta con una variedad de libros infantiles, y vecinos de la zona. Aunque la llegada del coronavirus frenó de golpe las ventas. “Al comienzo lo pasamos mal, con miedo. Estuvimos un mes abiertos, durante el mes de marzo, pero luego ya era insostenible”, confiesa González. Las fotocopias, productos para fumadores y prensa no eran suficientes para cubrir los gastos y los sueldos de cinco personas: “Tuvimos que entrar en ERTE; estuvimos un tiempo hasta que, al cabo de las tres semanas, ya volvimos a retomar la actividad”.
Pero, admite el ceutí, desde que terminó el confinamiento les ha ido mejor. “Por cómo está la situación ahora mismo, nosotros no podemos quejarnos en absoluto porque la clientela aquí siempre responde; somos referencia en la zona, tenemos mucha y muy fiel”, asegura el comerciante. La pandemia también aceleró la puesta en marcha de aquellos proyectos aparcados por el ritmo agitado del día a día, como abrir una página del local en internet.
Y aunque el propietario de la librería es Juan José González, de 66 años, padre e hijo se complementan sin problemas para llevar el negocio. “Yo desde el año 2000 estoy con él aquí, pero vamos, como si fuéramos uno los dos. Yo le comento las cosas que veo que hay que implementar, y él no me pone pegas nunca para nada. Él lo ve y lo apoya, como ahora con la página web”, expone el ceutí.
Con el sitio y las redes sociales, que empezarán a funcionar dentro de un mes porque “eso lleva muchísimo trabajo detrás”, los González se embarcarán en el mundo de los pedidos en línea para recoger en tienda y los envíos a domicilio. En la actualidad ya registran encargos de libros y material de oficina y escolar.
Pero procuran tener en la propia tiendan una variedad amplia de productos; cuentan con 1.000 títulos en stock y más de 3.000 referencias en artículos de papelería. Se puede adquirir desde cuadernos, agendas, lápices, bolígrafos, gomas de borrar hasta mochilas, así como la prensa diaria o las últimas novedades editoriales en el mismo día que salen a la venta en Península, tanto para adultos como para niños y jóvenes.
El origen de esa librería está en "el estanco de Alcántara, sito en la calle Real. Por cierto, lo de Alcántara tenía el nombre del anterior propietario. Recuerdo al Sr González, alto, con bigote, muy serio y escribiendo a máquina. Pocas veces que compré ahi