No hay nada mejor que el olor a café recién hecho. Su aroma ya nos pone de buen humor y nos llena de energía antes de saborearlo. Si, además, se trata de un café natural el efecto que provoca en nuestros sentidos es aún mejor. Así es el café en
‘Carlis’, una cafetería situada en la calle Real 40. Carlos Toledo, propietario de este
establecimiento, lleva desde 2008 ofreciendo a los ceutíes el mejor café 100% natural tanto en desayunos como meriendas.
“Cafetería Carlis se abrió en 2008. Llevamos alrededor de unos 13 años y nuestra actividad es cafetería en temas de desayunos y meriendas. Estamos al 100% con eso”, apuntó. Este ceutí decidió abrir este negocio tras estar trabajando anteriormente en el gremio de los joyeros. Sin embargo, la hostelería es algo que ha llevado siempre dentro desde pequeño y que, finalmente, pudo sacar a relucir.
“Yo de pequeñito empecé en el mundo de la hostelería y es algo que siempre lo he llevado. Venía de otra actividad, lo que pasa que siempre he querido trabajar por cuenta propia. Es una cafetería familiar, donde trabajamos mi mujer y yo, y de vez en cuando se pasa mi hijo por aquí y nos echa una mano, pero principalmente somos los dos”, contó. Carlos, junto a su mujer Isa, levanta cada día la persiana de esta cafetería para sacar adelante un negocio que simbolizaba su gusto por la hostelería.
El trabajo de su juventud y la pasión por este mundo, le dio la experiencia necesaria para abrirse camino entre cafés e infusiones. Pero este ceutí no duda en seguir formándose para mejorar el servicio que ofrece a sus clientes. “Esto es algo que se lleva a quien le guste este mundo pues eso va sobre la marcha. La experiencia, el tiempo y, a parte, siempre hacemos los cursos que nos ofrecen tanto la Cámara como el SICTED. Pues es otra de las formaciones que tenemos”, señaló.
‘Carlis’ está dedicada al servicio de desayunos y meriendas, por lo que cuenta con una amplia variedad de productos para el deleite y disfrute de los paladares caballas. “Nuestros cafés son 100% natural y todos los productos son de primera calidad”, apuntó.
Estos cafés pueden ir acompañados tanto por una buena tostada o por una torta del Algarrobo, un producto que viene expresamente de la Península a este establecimiento, como por una magdalena con aceite de oliva o un cruasán con mantequilla. “Tenemos cuatro o cinco clases de panes. A parte, pues tenemos unos cruasanes de mantequilla y torta Algarrobo, que nos las traen expresamente de fuera o unas magdalenas de aceite de oliva. Son productos que nos los traen directamente de afuera”, indicó.
Los ceutíes pueden acudir a disfrutar de todos estos productos con total garantía de seguridad, ya que ‘Carlis’ cuenta con un certificado que demuestra que su local está preparado para reducir el contagio por
coronavirus. Además, su servicio y trato hacen que los clientes sigan acudiendo a esta cafetería cada día para saborear su café 100% natural.
Por el momento, este ceutí no se aventura a realizar ningún cambio en su local. La incertidumbre en la que seguimos sumergidos causada por el coronavirus no facilita la innovación o las novedades en el mundo de la hostelería. Carlos y su mujer seguirán llevando a cabo su servicio con las medidas establecidas y viviendo día a día, sin pensar en el futuro.