Nayim, en busca de futuros talentos del fútbol

Si hay un figura que aunque pase el tiempo sigue iluminando los corazones de los ceutíes es, sin duda, la de Nayim. Lejos queda ese 10 de mayo de 1995 cuando un gol del ceutí cambió la historia tanto de él como del Real Zaragoza. Es un enamorado del fútbol y por eso desde que se retiró ha seguido ligado a este mundo.

Siempre intentando ayudar a los más pequeños para que crezcan y cumplan el sueño de ser futbolista, ejerce además de comentarista de partidos en plataformas como Dazn o La Liga para el Reino Unido. Ahora su vida es un poco más tranquila, pero para nada alejada de los terrenos de juego. Nayim ha hablado con El Faro y ha explicado los proyectos en los que se encuentra y la actualidad deportiva de nuestra ciudad.

En estos momentos, Nayim se encuentra en la Comunidad de Aragón donde está inmerso en distintas escuelas de fútbol, intentando captar talentos desde edades tempranas. Su experiencia es fundamental para que estos chicos crezcan y puedan convertirse algún día en futbolistas. “Llevo mucho tiempo trabajando con los jóvenes, era una cosa que también hacía en Ceuta. Me gusta ya que puedes ir viendo poco a poco el crecimiento de los chicos. En campus conocimos, por ejemplo, a Álex Mora y ahora está en las categorías inferiores del Real Madrid. Son jugadores de Ceuta con mucha proyección pero hay que dejarle que puedan crecer tranquilamente”.

Nayim tiene claro que los jugadores deben crecer deportivamente pero sobre todo hay que formar personas. “A ver si poco a poco más jugadores de nuestra ciudad siguen saliendo, pero siempre hay que tener en cuenta que lo importante es inculcarles valores para formar a buenas personas”, ha proseguido.

Asimismo, el mítico jugador caballa ha tenido palabras de elogio sobre el primer equipo de la ciudad que ahora mismo compite en una Liga tan exigente como la Primera Federación. “El equipo ha realizado dos temporadas impresionantes. Se está haciendo un trabajo muy serio. Desde la distancia me da mucha alegría ver cómo se está trabajando y todo lo que se está haciendo por el club. Sobre todo estoy contento por Luhay Hamido -presidente del club- ya que lo conozco personalmente y el trabajo que está realizando es extraordinario. Ahora es cuando más se necesita tanto el apoyo de la afición como de las instituciones”, ha apostillado.

"Llevo mucho tiempo trabajando con los jóvenes, era una cosa que también hacía en Ceuta"

Asimismo, Nayim ha querido alabar también el trabajo con el filial, donde hay gente muy joven de Ceuta que tiene muchas posibilidades. “Es el momento de dar confianza a estos jugadores y que puedan crecer profesionalmente. Hay buena base pero hay que dejarles su espacio y sobre todo darles oportunidad”.

Nayim valora el buen momento que atraviesa el jugador ceutí, Anuar Tuhami, en el Real Valladolid. Ha crecido de manera considerable y eso no pasa por alto a todas las personas del mundo del fútbol. “El otro día vi el partido entre el FC Barcelona y el Real Valladolid, y el mejor de su equipo fue Anuar. Está en una posición en la que se desenvuelve mejor y le da la posibilidad de incorporarse al ataque y marcar como hizo en el Sevilla. Está realizando un gran inicio de temporada. Es un jugador muy trabajador y sobre todo un gran chico, ya que le conozco personalmente. La verdad que me da mucha alegría verlo así y solo espero que siga”.

Al igual que hizo él en su día cuando emprendió su marcha al extranjero para seguir su vida de futbolista, aconseja a los jugadores jóvenes que no cuenten con tantos minutos que marchen a otros lugares ya que le servirá para sumar minutos y para tener una experiencia personal. “Lo importante es jugar. Es muy difícil estar entrenando los días y cuando llega el partido que no cuenten contigo. A veces hay que tomar la decisión de irse a un equipo extranjero y tener muchos minutos. Anuar hizo lo mismo y ahora es titular con el Valladolid”, detalla Nayim en esta entrevista.

27 años de un gol para la historia

Fue el día 10 de mayo de 1995. El Arsenal, vigente campeón de la Recopa, buscaba su segunda corona consecutiva ante el Real Zaragoza, el equipo revelación del torneo. La diferencia sobre el papel queda plasmada hasta el minuto treinta, con clara superioridad de los ‘gunners’, pero transcurrido ese primer tercio de la final el equipo maño se quita los grilletes y le plantea un partido. Durante el encuentro suceden muchas cosas, pero no es hasta el tramo final, cuando la emoción del fútbol llega a todos los rincones de España y sobre todo de Ceuta.

A 24 segundos del final del segundo tiempo de la prórroga y por lo tanto del encuentro, Nayim recoge un balón en el centro del campo, mira opciones de pase, ve a Semana adelantado y, desde 50,5 metros, suelta un voleón que alcanza los 11,7 metros de altura y supera al portero inglés, penalizado por esa habitual manía suya de situarse casi en la frontal del área. Aquel mágico gol de Nayim, grabado en la retina de todo el fútbol español y sobre todo del caballa, le dio al Zaragoza el primer único título europeo de su historia, hoy cumple 25 años.

La celebración del gol está en la retina del mítico futbolista “una frase de mi padre. ‘Ya me puedo morir tranquilo’, me dijo. Me llegó al corazón”.

Trayectoria como futbolista

Empezó su carrera como profesional en las categorías inferiores del F. C. Barcelona, promovido por el entonces entrenador del conjunto catalán Terry Venables. Era habilidoso, de una técnica excelente pero indisciplinado en ocasiones. Logró formar parte en diversas ocasiones en la selección nacional sub-21 y llegó a militar en el primer equipo azulgrana, con el que ya había debutado la campaña anterior, en la temporada 1987-1988, aunque disputó muy pocos partidos.

Fichó por el Tottenham Hotspur de la Premier League inglesa en el ejercicio siguiente, donde pronto se hizo con la titularidad y con el apoyo de la afición inglesa, debido a sus excelentes actuaciones contra el gran equipo rival del conjunto londinense, el Arsenal. Permaneció durante casi cinco temporadas en la escuadra británica.

Fichó por el Real Zaragoza, a finales de la temporada 1992-1993. Con este club logró sus mayores éxitos como futbolista. No obstante, no llegó a alcanzar la titularidad hasta pasado un tiempo, debido al excepcional momento de forma de José Aurelio Gay. En el año 1994 consiguió la Copa del Rey española frente al Celta de Vigo en la tanda de penaltis. Pero su mayor hazaña como futbolista la logró el 10 de mayo de 1995, en París, donde se proclamó campeón de la Recopa de Europa.

Sin embargo, este fue el punto culminante de su carrera, ya que ese mismo verano, el club vendió a Esnáider, una de sus grandes estrellas, y otros de sus jugadores llegaron al ocaso de sus carreras, con lo que el equipo vio una regeneración. En la temporada 95-96 apenas pudo marcar un solo gol en Anoeta y formó parte del grupo de eternas glorias que abandonó el conjunto de La Romareda, lastimosamente, por la puerta de atrás: (Pardeza, Paquete Higuera, Cedrún, Belsué, Cáceres, Poyet, etc.)

Sus últimos días como jugador de fútbol los pasó en el Logroñés que alternó durante unos años su estancia en Primera y Segunda división española.

El talento es oro

Nayim sabe de sobra que con talento se nace pero que hay que ir trabajándolo para día a día desarrollarlo. Desde que se retirara del fútbol, siempre ha estado ligado al mundo del balón de una manera u otra.

Sobre todo ha desarrollado muchos campus, en los que incluso en nuestra ciudad han llevado su nombre. Abundantes eran los jóvenes que se apuntaban en las diferentes semanas y aprendían variadas técnicas.

En ese campus lo visitaban exjugadores profesionales lo que les daba mucho más empaque y hacía que los jóvenes pudieran disfrutar al lado de ‘viejas’ glorias.

En ese tipo de campamentos que se solía celebrar en el mes de julio en el estadio Alfonso Murube, ha estado presente Álex Mora, un joven caballa que pasó por el filial del Real Betis Balompié y en la actualidad defiende los colores de uno de los clubes más importante del mundo, el Real Madrid.

Esa es una prueba más que clara que hay que confiar en los jóvenes para pulirlos y sacar lo mejor de ellos. Es importante tener una fuerte cantera para disponer de un gran primer equipo.