La Asociación Náuticos de Ceuta tiene su propia visión sobre los últimos acontecimientos que han sacudido este verano al Puerto Deportivo: decomiso de 700 kilos de hachís, detenciones por el robo en el interior de las embarcaciones y la afluencia de ‘barco-taxis’ que se repite cada verano. La entidad quiso ayer centrarse en los atraques de naves de bandera extranjera y la “falta de control por parte de la Policía Nacional sobre las identidades de las personas que acceden a Ceuta por estas instalaciones”. Una medida a tener muy presente en verano y con independencia de la nacionalidad.
A diferencia de los requisitos que exige Marruecos a las embarcaciones que recalan en sus puertos, donde Náuticos de Ceuta recuerda que todos los tripulantes tienen que registrarse antes de tocar tierra, en Ceuta la inspección es más laxa. El marinero del Puerto Deportivo ni tiene competencias ni autoridad para controlar y comprobar si sobre alguna de esas personas pesa una orden de busca y captura o si el pasaporte que aporta es válido o no. Un “descontrol” que, recuerda el colectivo, perdura con un nivel 4 de alerta antiterrorista.
Marina Hércules (Mahersa) ya elevó a la Delegación del Gobierno en dos ocasiones, que Náuticos de Ceuta tenga constancia, sobre ese desorden. Unos escritos en los que solicitó presencia policial y control del tráfico porque ese cometido en ningún caso le corresponde a la concesionaria.
Para esta asociación, el hecho menos relevante es si las embarcaciones con matrícula de Marruecos ejercen como taxi o no. Desde Náuticos de Ceuta abogan por que Ceuta sea un destino atractivo ya que repercute positivamente en la economía de la ciudad, aunque indica que esta apuesta está reñida con la seguridad porque cada embarcación que entra puede dar un número incierto de personas a bordo.
En cuanto a la operación contra el narcotráfico desarrollada la semana pasada en el Puerto Deportivo, la entidad aludió a la preocupación de los usuarios. Una imagen que tampoco mejora con el “vertedero de gomas” que acumula el Servicio Marítimo de la Guardia Civil. Un aspecto al que, a sus ojos, debería prestarse atención porque va de mal en peor.
Según los cálculos de Náuticos de Ceuta, cada barco puede trasladar a entre cuatro y diez personas que, a razón de entre 20 y 30 barcos diarios solo de Marruecos, supone 100 o 150 personas que entran y salen de Ceuta en verano sin control. Una competencia que corresponde a la Policía Nacional, responsable de las labores de identificación, puesto que la Guardia Civil es fiscal y para la inmigración. Por este motivo, insistió en la necesidad de implantar un puesto en el Puerto Deportivo.
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