Nicolás Dietl Sagüés. miembro del Centro Español de Sindonología, ofrece la conferencia ‘La Síndone de Turín a la luz de la ciencia’ mañana viernes 17 de marzo a las 19.00 horas en la parroquia de Nuestra Señora de los Remedios.
El Centro Español de Sindonología (CES), la asociación cultural sin ánimo de lucro que tiene por objeto el estudio de la Sábana Santa y otras reliquias, ofrecerá la conferencia titulada ‘La Síndone de Turín a la luz de la ciencia’ mañana viernes 17 de marzo a las 19.00 horas en la parroquia de Nuestra Señora de los Remedios.
La Sábana Santa es una tela de lino que muestra la imagen de un hombre que presenta marcas y traumas físicos propios de una crucifixión que es considerada por muchos el lienzo en el que fue amortajado Jesus de Nazaret, figura central del cristianismo. “Un milagro que el Señor quiso que llegara a nuestros días para dejar una prueba de su poder y gloria”, explica la organización, que invita a los ceutíes a asistir.
Nicolás Dietl Sagüés, miembro del CES, se encargará de impartir esta ponencia divulgativa, aunque sin faltar al rigor científico, que tiene por objetivo difundir los conocimientos que hay sobre este singular objeto y de otras reliquias relacionadas, como el Sudario de Oviedo. El conferenciante es licenciado en Ciencias Físicas además de profesor tutor de la UNED.
–La Santa Sede autorizó que se le practicara la prueba del Carbono-14, que dató la Síndone en la Edad Media. ¿Es por tanto un fraude? –Esta técnica no es utilizable en un objeto de estas características. En primer lugar, los tejidos tienen muchas formas de contaminación y eso los arqueólogos lo saben. Se suelen datar por Carbono-14 muestras u objetos arqueológicos que han salido de una excavación y han permanecido así durante cientos e incluso miles de años. En este caso estamos hablando de un objeto que ha pasado por múltiples capillas y catedrales y que ha estado sometido, que se sepa, a tres incendios. Eso ha podido modificar su composición. Hemos presentado ponencias en nuestros últimos congresos internacionales sobre esta hipótesis, sobre que se hayan podido alterar los resultados por estas causas. Ésto los arqueólogos lo saben, que estas pruebas tienen un 67 por ciento de fiabilidad. Los resultados de la datación del año 88 no son válidos para la mayoría de la comunidad científica.
–El mayor misterio de la Síndone es la proyección de la imagen de un cuerpo humano sobre el lienzo. –A día de hoy nadie ha sido capaz de explicar desde el punto de vista científico de un modo satisfactorio cómo se ha formado la imagen. Ese es el núcleo de la cuestión. Por lo tanto, lo convierte en un objeto desde un punto de vista científico imposible. Esa explicación hoy día no pasa por una mera descripción del montaje experimental, no, pasaría por una reproducción exacta. Pero eso sí, que tuviera las mismas características microscópicas que la Síndone de Turín. Y no habido nadie que lo haya hecho hasta ahora. Incluso había una revista americana hace unos años que ofrecía un millón de dólares a quien lo hiciera. Se ha conseguido reproducir la decoloración de la imagen de este hombre en la sábana nada menos que en el ENEA, una institución científica italiana de mucho prestigio, con láseres de muy alta precisión sobre un tejido de lino de forma similar a la sábana de Turín. Para obtener una imagen de un hombre frontal y dorsal pusieron 10.000 láseres de ese tipo. Entonces la pregunta es evidente: ¿Me puede explicar alguien cómo se puede hacer eso en el siglo XIII que decía la datación del Carbono-14, XIV, en el VII o en el I. Es decir, a día de hoy, nadie ha sido capaz de explicar de un modo satisfactorio cómo se ha formado la imagen. Por lo tanto es un objeto en ese sentido imposible.
–¿Existen coincidencias entre la Sábana Santa y el Sudario de Oviedo? –Hay coincidencias geométricas, desde el punto de vista de la topografía, en la superficie del rostro a tenor del estudio con más de 3.000 muestras realizadas para explicar cada una de las manchas del sudario de Oviedo –tejido que se utilizaba para tapar el rostro del muerto–. ¿Coincidencias? Por ejemplo, la sangre del grupo AB, igual que la sangre de la Sábana de Turín. Hay una serie dé heridas, un total de unos 50 puntos de coincidencia geométrica, por ejemplo, en la zona del occipital que son heridas de sangre, letales, hechas en vida, igual que coinciden con la región del occipital de la cabeza del hombre de la Síndone. Para concluir los científicos, mediante técnicas totalmente diferentes, que esas dos telas han envuelto la misma cabeza. Atribuida a Jesús de Nazaret.
–La veneración de reliquias es un asunto controvertido... –La fe que profesamos los cristianos se basa en hechos históricos que han ocurrido realmente. Entonces cualquier vestigio o luz que arrojemos sobre estos hechos, investigando, es mejor. Jesucristo existió, hizo las cosas que hizo, que narran los evangelios y son libros que nos merecen toda nuestra credibilidad por los criterios de autenticidad, veracidad e integridad. Por muy sorprendente que nos resulte. El problema de esta reliquia y de estos hechos es el personaje al cual remiten. Se trata de la sábana que envolvió muy probablemente el cuerpo de Cristo, después de muerto, y si esto es verdad como parece, a lo mejor es verdad el resto, y si es así, es mejor cambiar mi vida esta tarde que mañana. Ese es el núcleo de la cuestión, el personaje al cual remite que no nos puede dejar indiferente. Por eso es un tema tan incómodo hoy en día.