El
nadador ceutí Nacho Gaitán vencía hace unos días, con autoridad, la X Travesía Vuelta al Hacho registrando un tiempo de 2 horas, 16 minutos y 27 segundos en la
Playa de la Ribera, Ceuta.
Para el joven, que ya había realizado esta prueba en años anteriores, no pensaba que aún con el cambio de recorrido, los resultados iban a ser tan buenos: “Debido al recorrido fue una experiencia nueva, estoy muy contento, no esperaba el resultado que tuve”.
Nacho se considera como “un niño del Caballa” y siempre ha estado vinculado al club, de hecho fue lo que le impulsó a introducirse en la competición: “Me he criado en el Caballa y como todo niño del Caballa, empiezas haciendo natación y después waterpolo. A nivel competición con 10 años empecé a hacer las travesías que organizaba el
Caballa”.
Alrededor de Nacho son muchos los que le apoyaron y le siguen apoyando en cada paso que da y en cada decisión que toma pero siempre tiene presente a los que fueron sus entrenadores desde el inicio de su andadura: “Me apoya un montón de gente pero me podría acordar mucho de los entrenadores que tuve cuando era pequeño en el equipo de waterpolo. Especialmente me acuerdo de Ángel ya que con él descubrí lo que era la competición y me divertía mucho. El me ha transmitido el espíritu de sacrificio y de diversión que sigo manteniendo”.
Cuando comenzó de pequeño, el nadador ceutí no se imaginaba que iba a llegar a conseguir estos resultados y mucho menos que estaría compitiendo junto a rivales de gran importancia pero el trabajo, la dedicación y la constancia han hecho que ahora se encuentre entre los mejores: “La verdad es que estas cosas no te las esperas pero la gente que me conoce sabe que tengo mucha constancia. Cuando se me mete algo en la cabeza, voy a por ello”.
A lo largo de los años, Nacho Gaitán ha ido mejorando su rendimiento y su capacidad. Cada año se proponen mejorar todo lo posible para estar en lo más alto. Tanto él como su entrenador, José Manuel Díaz, ponen todo su esfuerzo y dedicación cada día: “Yo hago lo que me manda el míster. Me lleva desde que tengo 14 años y yo le hago caso ciego”.
Este año los entrenamientos han tenido que subir la intensidad ya que el nadador del Club Natación Caballa necesitaba mejorar más para conseguir lo propuesto: “En época de carga máxima de entreno he estado haciendo 6 días de agua, 3 días de carrera y 3 días de gimnasio. En total entre 11 y 12 entrenos semanales porque hay algunas semanas que en vez de tres días de carrera, solo hacía dos”.
Nacho Gaitán no tiene descanso, día a día se esfuerza al máximo para poder mejorar su rendimiento: “Los domingos le escribo al entrenador para ver el plan de la semana, qué días tengo gimnasio y qué días tengo natación en el mar o en la piscina, porque compagino las dos cosas. Una vez me dice el plan me voy organizando en base a mi horario de estudio y de trabajo. Se intenta sacar el hueco para poder entrenar y ya está”.
Las duraciones de los entrenos del joven suelen variar dependiendo de la intensidad pero siempre con el objetivo bien definido: “Si un día me manda 4 mil metros y lo hago en una hora, pues una hora de entreno, y si un día me manda 4 mil y hay muchos descansos entre series y tardo una hora y media, pues una hora y media. Lo que mande él”.
Actualmente y tras la exitosa última prueba han tomado la decisión de bajar el ritmo de entrenamiento durante un par de semanas: “Ahora lo que hemos hecho es bajar el ritmo y después entrenaremos para 5 mil metros que requiere otro tipo de entreno”.
“Es un orgullo hacer una prueba al lado de una persona olímpica”
La organización de la Copa de España este año se ha visto afectada por el Covid y ha cambiado mucho tal y como lo comentaba Nacho Gaitán: “La Copa de España consiste en una prueba de 250 puntos, otra prueba de 500 puntos y una última prueba de 1.000 puntos. Hay varias etapas y tienes que participar en todas estas, el mejor resultado que tengas en cada una de las pruebas, es la que te puntúa. Yo por ejemplo al ganar la Vuelta al Hacho, que es considerada de 250 puntos, ya tendría 250 puntos en la Copa de España”.
El nadador nos explicaba también como funcionaría la puntuación si ganara en las pruebas que le quedan por realizar: “Ahora tengo que ir a Cáceres, a una prueba de 500 puntos, y a Málaga a una de mil puntos. Si quedo en segunda posición, por ejemplo, en vez de darte los 500 puntos, te darían unos 400 y pico. En Málaga la situación es igual, si quedo primero me darían los mil puntos, en el caso de que no fuera así, la puntuación sería menor”.
En cuanto a sus rivales, Nacho, ahora mismo se encuentra luchando con gente con mucha experiencia: “Son gente que llevan un montón de años. Jaime Márquez es muy bueno y Alberto Martínez Murcia está clasificado para los 10 kilómetros olímpicos”.
Y aunque el joven piensa que “con esa gente no tengo nada que hacer”, sigue sintiéndose orgulloso de poder participar con gente tan experta: “Es un orgullo tirarte a una prueba y que al lado tuya haya una persona que es olímpica o un chaval que lleva toda su vida nadando y es un crack”.
“Cuando nado disfruto. El día que deje de disfrutar, dejaré de nadar”
Gaitán considera la natación como su día a día: “Yo me acuesto el día de antes y ya estoy pensando en que hora voy a poder nadar al día siguiente. Para mí significa mucho, es mi vía de escape”
Nacho ha disputado muchas pruebas pero la que sin duda le marcó fue la que realizó en el 2019 ya que llevaba mucho tiempo quedándose a las puertas de la primera posición: “La que más me ha marcado sin duda fue la Vuelta al Hacho del año pasado porque llevaba quedándome a las puertas un montón de años seguidos. En el 2015 quedé segundo, en el 2016 también quedé segundo, en el 2017 tercero, en el 2018 quedé de nuevo segundo y la de 2019 por fin la gané”.
Pero a parte del esfuerzo que le supuso conseguir esa victoria, al nadador caballa, lo más emocionante para él fue la forma en la que la consiguió: “Para mí fue emotiva la manera en la que la gané, le saqué medio cuerpo al marbellí y luego corriendo hacia la meta fue cuando lo superé. Para mi esa victoria es la que recuerdo con más cariño” así no lo contaba la joven promesa.
“El futuro no lo miro muy lejano. Ahora miro a septiembre”
El joven nadador, en ningún momento de su carrera se ha planteado abandonar y tampoco tiene previsto dejar por ahora la competición pues ni las lesiones ni su vida privada le impiden seguir disfrutando de este deporte tan sacrificado: “De momento no pienso en dejarlo, estuve lesionado en 2018 y mientras mis lesiones respeten, y por tema de trabajo y estudios pueda, seguiré nadando”.
Como nos comentaba antes Gaitán, la próxima prueba tendrá cabida en el mes de septiembre y se llevará a cabo en la ciudad de Cáceres. Para esta prueba, el ceutí solamente quiere realizarlo lo mejor posible, aun así prefiere no pensar mucho en su futuro lejano aunque lo que sí tiene claro es que aunque abandone la ciudad, quiere seguir con este deporte que es su pasión: “Yo el futuro no lo miro muy lejano. Lo que miro ahora es las pruebas de la Copa de España que tengo en septiembre, intentar hacerlo lo mejor posible y a ver qué sale. Acabaré mis estudios el año que viene y si me voy intentaré seguir nadando”.
El nadador ceutí no quiso terminar sin dedicarle la victoria a su principal apoyo: “Se la quiero dedicar a mi madre, ella sabe lo complicado que ha sido este año”.