La solidaridad con Siria y Palestina sonó ayer en clave de rap en el Teatro del Revellín.
Unas 200 personas asistieron al concierto organizado por Nahnu Maakom, cuya recaudación irá a un campamento a través de la Fundación Muslim Relief.
Los bombardeos han detenido la vida en Siria provocando el éxodo masivo. Para combatir la desesperación de un pueblo empujado a dejar su país por culpa de la guerra, la Asociación Nahnu Maakom celebró ayer en el Auditorio del Revellín un concierto en favor de los refugiados sirios.
La recaudación está destinada a un campo de refugiados en el Líbano, donde la Fundación Muslim Relief hará llegar la ayuda en forma de alimentos, medicamentos y mantas. “Siria lleva ya casi seis años en conflicto y hay una ola de refugiados como hace tiempo que no se veía, desde la Segunda Guerra Mundial”, indicó Fatima Haj Ibrahim, presidenta de Nahnu Maakom.
Ante las dificultades para trasladar la “donación” hasta Siria, la aportación desde Ceuta recalará en el campamento más próximo, “donde hay millones de personas sin techo, pasando frío y hambre”, señaló un portavoz de la organización. “Muriendo de frío”, apostilló Haj Ibrahim.
La solidaridad con Siria sonó ayer en clave de rap en el Auditorio del Revellín. Allí los organizadores del concierto no olvidaron su “principal y noble” causa: Palestina.
El ceutí Ilías Piony trajo las primeras rimas con su tema ‘Free Palestina’, que cantó a capella. Este artista local dio paso a Jeebli, el rapero marroquí afincado en Barcelona que vino expresamente a la ciudad autónoma para interpretar sus letras reivindicativas en este acto solidario.
Los 200 espectadores que asistieron a este evento reclamaron una “Siria y Palestina libres” y enviaron un mensaje por la paz que los niños portaron en pancartas individuales hasta completar el eslogan: ‘No a la guerra’.