La forma de circular en las rotondas suelo ser motivo de discusión en Ceuta. La Dirección General de Tráfico (DGT) estima que uno de cada tres conductores implicados en un siniestro en rotondas estaban cometiendo una infracción.
El desconocimiento sobre la prioridad de paso y una incorrecta entrada o salida de la rotonda contribuye a la hora de sufrir un accidente. Evitar actitudes temerarias al volante siempre ayuda no solo a prevenir daños físicos y materiales, sino sino también a esquivar las multas y sanciones.
La DGT informa de que saltarse las normas de prioridad y velocidad influye en los casos de siniestralidad en glorietas. Concretamente, en las carreteras, el 20% de los accidentes se cometieron por infracciones relacionadas con la prioridad de paso, mientras que el 8% fue a causa de la velocidad.
En el caso de las ciudades, estos datos son del 19% y del 5% respectivamente. Con el objetivo de disuadir a los conductores de mantener tales conductas imprudentes, se han establecido una serie de sanciones.
En caso de entrar en una rotonda sin respetar la prioridad, se aplicará una multa de 200 euros y se restarán 4 puntos del carné de conducir. Esta infracción es la más común en las rotondas. La DGT recuerda que los vehículos dentro de la rotonda tienen prioridad sobre los que intentan acceder, a menos que una señal de tráfico o un agente de tráfico indiquen lo contrario. Esta norma es crucial para prevenir frenazos bruscos y colisiones.
Además, se aplica al abandonar la rotonda, y si se intenta salir desde los carriles interiores, lo que implica cruzarse con otros vehículos, la gravedad de la infracción podría llegar a considerarse un delito, con una multa de 500 euros y la pérdida de 6 puntos del carné de conducir.
El exceso de velocidad en las rotondas también se considera una falta grave, con una multa de 500 euros y 6 puntos menos. En casos donde se haya puesto en peligro la vida de otros usuarios de la vía, esta acción podría considerarse un delito.
Realizar maniobras inapropiadas al cambiar de carril en una rotonda también puede dar lugar a multas. Cambiar de carril sin respetar la prioridad conlleva una multa de 200 euros, aunque no se restan puntos. Sin embargo, si se comete esta infracción en presencia de usuarios vulnerables en la rotonda, como ciclistas o motoristas, la consecuencia es una multa de 500 euros y la pérdida de 6 puntos, lo que podría considerarse un delito.
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