J.R.G. se ha conformado a pagar una multa de 900 euros por un delito de resistencia que tuvo lugar el pasado 16 de junio en su domicilio de la calle Álvarez.
Al encontrarse en estado de gran embriaguez, sus familiares decidieron pedir ayuda a personal sanitario. No obstante, y debido a la oposición demostrada por J.R.G. a recibir asistencia médica, se hizo preciso reclamar la presencia en el domicilio de agentes de la Policía Nacional.
Tras personarse en la vivienda, el acusado empujó y retorció la camisa a uno de los agentes y le golpeó en la pierna derecha. Seguidamente se dirigió a la cocina e intentó coger un cuchillo, por lo que tuvo que ser reducido por los efectivos de Policía tras un forcejeo, debiendo emplear la fuerza mínima indispensable.
Durante el forcejeo el acusado amenazó a los agentes y al personal médico con expresiones como: “Os voy a matar en cuanto os vea por la calle. Os voy a matar. Sois unas mariconas”.
Otro hecho polvo más.